Los precios de los pisos todavía no han llegado a los niveles alcanzados en pleno boom del ladrillo y son todavía un tercio más bajos que el importe que había que desembolsar a finales de 2007. La tendencia en el mercado inmobiliario se mantiene al alza desde el año 2016 en España, aunque con distintas velocidades según el momento en que la crisis golpeó con más dureza cada comunidad. Las viviendas terminadas en Galicia (usada y nueva) cuestan una media de 1.078 euros el metro cuadrado, lo que supone un incremento interanual del 0,8%, según los datos provisionales de la sociedad de tasadores Tinsa del tercer trimestre del año. Pese a este repunte, la recuperación del sector inmobiliario en la comunidad se queda por debajo de la experimentada en el conjunto del país, con un aumento del 4,9% que se traduce en un coste medio de 1.317 euros el metro cuadrado. Este balance sitúa las tarifas en Galicia un 18% por debajo de la media nacional.

La radiografía provincial y de las ciudades en la comunidad dibuja también dos velocidades en la recuperación del mercado de la vivienda. De las capitales de provincia gallegas solo A Coruña y Vigo han colocado en el mercado viviendas a un precio más alto que hace un año, con un aumento del 3,1% y del 1,1%, respectivamente. El incremento protagonizado por la ciudad coruñesa en el último año, con un coste medio de 1.567 euros el metro cuadrado, se traduce en un desembolso un 45,3% por encima de la media gallega y casi un 20% más que la hipoteca media que toca afrontar en el conjunto del país.

Le sigue en el ranking autonómico Vigo, con un precio de 1.319 euros el metro cuadrado, un 22,3% más que el coste en el conjunto de la comunidad y casi el mimo importe que en la media nacional (1.317).

En el extremo opuesto del sector inmobiliario gallego se encuentra la ciudad de Ourense con una caída de las tarifas durante el último año de casi el 10% -una media de 977 euros el metro cuadrado-, seguida de Lugo (-3,2%, con 841 euros de coste) y Pontevedra (-2,9%, con un desembolso de 1.142 euros).

En el conjunto del país, la revalorización de la vivienda en los últimos dos años alcanza ya el 9% aunque todavía está un 35,7% por debajo de las tarifas máximas del mercado inmobiliario a finales de 2007. Las comunidades que tienen una mayor diferencia de precio respecto a hace diez años son Castilla-La Mancha (-52,5%), La Rioja (-48,6%) y Aragón (-47,4%). En el lado opuesto, está Galicia junto a Madrid y Baleares, los territorios que más se aproximan a los precios que cada nuevo propietario tenía que desembolsar durante el boom del ladrillo. En el caso la comunidad gallega, la diferencia respecto a finales de 2007 es de -31,5; en Madrid se queda en -28,8% y en Baleares la brecha es de un -21,4%, según el balance de Tinsa.

En el mapa nacional, Cantabria es la excepción, ya que es la única comunidad que registró un descenso en los precios de la vivienda durante el último año (-1,1%). A la cabeza de los repuntes se sitúa Madrid (13%), seguida de La Rioja (11,8%), Baleares (casi 10%) y Navarra (8,7%).

En el ámbito provincial, un total de 13 registraron precios inferiores a hace un año. Los mayores descensos interanuales en el tercer trimestre de este año los protagonizaron los mercados inmobiliarios en Ourense (-5,2), seguidos de Cuenca (-4,9%), Castellón (-3,8%) y Salamanca (-3,4%).

Las provincias con el precio más alto por metro cuadrado son Guipúzcoa (2.291 euros), Madrid (2.265) y Baleares (2.146). Entre las más baratas, destacan Cuenca (702 euros el metro cuadrado), Toledo (713) y Teruel (720).