"La pesca es una industria muy madura y no esperamos que crezca más. Queremos que se mejoré el uso del pescado que pescamos". Así de claro valoró ayer en Vigo el presente, y sobre todo el futuro, del sector pesquero mundial la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).

Para el año 2030 las capturas permanecerán prácticamente invariables -crecerán un 1%-, mientras que la producción de acuicultura pasará a aumentar casi un 40%, superando en volumen a la pesca. Desde la FAO entienden que África y Asia deben liderar esta actividad para lograr cubrir la demanda de alimento global. Esta es una de las conclusiones alcanzadas durante el Congreso Internacional sobre Producción Pesquera Mundial organizado junto a Conxemar y que reunió en la ciudad olívica a más de 350 asistentes en la jornada previa a la feria de productos pesqueros que arranca hoy.

En boca de Manuel Barange, director de FAO de Políticas y Recursos del área, la institución aseveró que la pesca y la acuicultura "son parte del futuro" y "contribuirán a acabar con el hambre".

En el marco de un evento centrado en analizar el estado de las principales especies que explota la industria pesquera, Barange explicó que la acuicultura tiene que "compensar la balanza para cubrir la fuerte demanda" y que la perspectiva es que "puede crecer todavía más". "En Europa hay un problema de gestión costera. En países de Asia y particularmente en África hay mucho espacio disponible para el sector acuícola", añadió.

En el acto de inauguración, el presidente de Conxemar, José Luis Freire, ratificó el compromiso del sector con los objetivos de la FAO, mientras que la secretaria general de Pesca, Alicia Villauriz, indicó que "el objetivo del Gobierno" es la sostenibilidad.

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, destacó los datos pesqueros gallegos y explicó que es necesario generar "más ganancias" y se recordó la importancia del foro de debate que supone un congreso en el que se analizaron cinco especies:

Pescado blanco. El primero en intervenir fue Gorjan Nikolik, de Rabobank, que señaló que las capturas globales de pescado blanco alcanzaron en 2017 los 7,4 millones de toneladas, la segunda cifra más alta en volumen de producción de los últimos 20 años. A su juicio, los precios de estas especies aumentarán en el futuro.

Cefalópodos. El director del Departamento de Recursos Marinos del CSIC, Graham Pierce, centró su exposición en el análisis de la producción de cefalópodos. En la ponencia señaló los altibajos en las capturas de pota y calamar en el Atlántico Sudoccidental asociados al fenómeno El Niño y a los bajones en el caso del pulpo gallego en paralelo al aumento de las lluvias.

Atún. John Connelly, presidente del National Fisheries Institute (NFI) de EEUU, comentó la producción global de atún y señaló que el 78% de las capturas totales procede de stocks pesqueros saludables desde punto de vista biológico.

Langostino. John Sackton, editor del medio Seafood.com, ilustró que el langostino de cultivo representa el 77% de la producción mundial y el salvaje el 33%, con China como el principal país productor de langostino de cultivo y Argentina de langostino salvaje.

Salmón. Ragnar Nystoyl, de Kontali Analyse, analizó en su ponencia la producción de salmón salvaje y de cultivo, con unas previsiones de incremento del 5% para 2018 en la producción global de salmón.

En el acto de clausura, el ministro de Pesca, Luis Planas, destacó que es "fundamental" fomentar la sostenibilidad de los caladeros. En su primera visita a Galicia y tras acudir a la Agencia Europea de Control de la Pesca (EFCA, en inglés) subrayó en su intervención que España es el país con mayor capacidad de flota de la Unión Europea y el que más empleo genera