Las investigaciones puestas en marcha por la Policía, Guardia Civil y Servicio de Investigación de Incendios Forestales de la Xunta ya apuntan a "gente de la zona" como posibles autores del incendio forestal que durante casi 24 horas asoló el domingo montes del municipio de la localidad pontevedresa de Mondariz y obligó a desalojar a medio centenar de vecinos del barrio de O Barro. El fuego fue el quinto en una semana en Mondariz y el cuarto en cuatro días en un radio de tres kilómetros. Según fuentes cercanas a la investigación estos fuegos se producen históricamente en las mismas zonas , año tras año, siempre intencionados, y se cree que puede tratarse de personas de la zona con distintas motivaciones. Se espera que las investigaciones fructifiquen con alguna detención, según indican.

Las llamas quedaron controladas a media tarde de ayer tras 23 horas de trabajo. Los medios aéreos y brigadas continuaron enfriando la zona ante posibles reapariciones. El fuego afectó a 150 hectáreas, de las que la mayoría eran plantaciones de eucaliptos y monte bajo. El incendio, que estuvo cerca de petroglifos, se extinguió sin que finalmente resultase afectada ninguna vivienda y a media noche del domingo las personas que fueron desalojadas pudieron volver a sus viviendas. Además del dispositivo desplegado por la Consellería de Medio Rural, actuaron en la extinción Bomberos de Baixo Miño, Ponteareas, Ribadumia, efectivos de Protección Civil de la Mancomunidad Oitavén-Tela, Poio, Cangas, Mos, Redondela, Valga, Protección Civil, Ponteareas, agentes de la Guardia Civil, Policía Autonómica, 061 y Cruz Roja .

En total, participaron en las labores de extinción 15 agentes, dos técnicos, 46 brigadas, 27 motobombas, cuatro palas, un tractor, 10 helicópteros y dos aviones, según Medio Rural. Los aviones se incorporaron al sumarse medios enviados por el Ministerio de Agricultura, Pesca. Así a Mondariz se enviaron especialistas en las labores de extinción y medios aéreos, para colaborar en la lucha contra las llamas. Dos aviones anfibios de gran capacidad, dos helicópteros y una Brigada de Refuerzo contra Incendios Forestales se desplazaron a la zona. Según explicó el ministerio, se desplegaron medios aéreos y humanos "atendiendo a las peticiones de la comunidad".

Por otra parte, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, reprochó a la Xunta la demora el domingo de casi cuatro horas en pedir a los bomberos de su ciudad ayuda para colaborar en la extinción del fuego. El regidor vigués criticó que la Xunta no "hubiese aprendido nada de los incendios que asolaron Galicia hace justo año" e insistió en la necesidad de cambiar los protocolos para que no vuelva a pasar lo de ayer. Durante la noche visitaron la zona del conselleiro de Medio Rural, José González Vázquez, y el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda.

En unos días se cumple un año de la ola de incendios que destruyo miles de hectáreas en el sur de Galicia y el fantasma de aquellos días planeó sobre el incendio de Mondariz. Aunque hacía calor, la vegetación estaba seca, la humedad del aire era mínima y había viento, por lo que "las condiciones del domingo no se asemejaban a las de hace un año" indicó un miembro de los equipos de extinción, en alusión a la oleada de incendios de octubre de 2017 que arrasó hace un año más de 49.000 hectáreas, se cobró la vida de dos mujeres en Chandebrito y un vecino de Vigo. Por esa razón, en el fuego del domingo en Mondariz hubo muchos más medios disponibles cuando se activó la alerta de nivel 2.