Representantes sindicales de las prisiones en Galicia destacan el "elevado" seguimiento en esta primera jornada de huelga, que está decretada desde este sábado hasta el martes 20 de noviembre, día en el que concluirá con una marcha por Pontevedra.

En concreto, en Teixeiro, las centrales calculan que secundan la protesta más del 80% de los trabajadores, aunque en el turno de noche -aseguran- esta cifra se ha situado "aproximadamente en el 100%". En el penal coruñés, los trabajadores que sedundaron la protesta impidieron las comunicaciones con el interior, de forma que los familiares que llegaban para ver a los reclusos tuvieron que dar vuelta. Los funcionarios solo permitieron el acceso a las ambulancias para atender urgencias sanitarias.

La huelga, de carácter nacional y que sucede a la que tuvo lugar los días 24 y 26 de octubre, está convocada por la plataforma integrada por los sindicatos Acaip, Comisiones Obreras, UGT y CSIF, que advierten de que, si no son atendidas sus reivindicaciones, convocarán una huelga indefinida.

Reclamaciones

Portavoces de los sindicatos convocantes han incidido en que sus reivindicaciones pasan por mejoras, que no son sólo económicas, sino también de carácter laboral. Entre estas últimas, reclaman que los empleados de prisiones sean considerados agentes de la autoridad, no sólo como la Policía y la Guardia Civil, sino como el personal facultativo y educativo, y más recientemente los conductores de transporte público.

Para los sindicatos, el hecho de no tener esta consideración genera una "indefensión absoluta" a los trabajadores, ya que sin ella la mayor parte de las agresiones que sufren en el ejercicio de su función y que no tengan reconocido un daño físico constatable, "quedan en multas" que al final "quedan en nada" al ser insolventes sus autores.