Podemos, las Mareas locales, Anova y Esquerda Unida finalmente llegaron a un acuerdo y presentaron una lista alternativa a Luís Villares para dirigir En Marea. El elegido para encabezar la candidatura del sector crítico e intentar arrebatar la portavocía del partido instrumental es David Bruzos, de Ourense en Común, la marea de la ciudad de las Burgas, pero también próximo a Podemos.

Bruzos fue diputado de En Marea en el Congreso en 2016, pero perdió el escaño cuando se repitieron las elecciones generales. Este profesor de Física y Química fue el nombre que concitó el consenso de Podemos, las Mareas locales, Anova y Esquerda Unida. Encima de la mesa se barajaron otros nombres, pero finalmente fue Bruzos el que mayor consenso despertó entre las fuerzas que integran el bando crítico.

Las negociaciones para consensuar la composición de la lista que pugnará con Villares y sus afines no estuvo exenta de tensión. Las posiciones más difíciles de conciliar fueron las del partido morado y la fuerza nacionalista Anova.

Los nombres y la cuota de cada formación se discutían ayer por la noche, al cierre de esta edición. Finalmente, de los 20 puestos del Consello das Mareas que consideran de salida, Podemos se queda con siete plazas, las Mareas locales se reparten cinco, Anova, cuatro y Esquerda Unida, otras cuatro.

La elección de la nueva dirección del primer partido de la oposición se desarrollará a través de un sistema de listas cerradas como pretendía la actual dirección.

Las votaciones tendrán lugar, vía telemática, a partir del 1 de diciembre y se cerrarán a las 09.00 horas del 3 de diciembre. Los resultados se conocerán el día 5.

Tienen a derecho a participar más de 3.000 inscritos. Desde mayo, el censo creció en 600 personas. Podemos hizo un llamamiento a sus militantes a inscribirse. El objetivo de la formación morada es poder decantar la votación e inclinar la votación para su candidatura. El diputado coruñés Antón Gómez-Reino llegó a la dirección de Podemos Galicia con el propósito de que su partido tenga mayor protagonismo en En Marea.

Las primarias de diciembre son claves para el futuro del primer partido de la oposición. La formación está fracturada, y Villares se juega su liderazgo. El que fue cabeza de cartel de la Xunta se hizo con el poder orgánico si contar con el beneplácito de los principales pesos pesados de En Marea, es decir, los alcaldes del cambio, y las direcciones de Podemos, Anova y Esquerda Unida.

Su mayoría era débil, pero la división de los críticos permitió a Villares salvar las votaciones, hasta el último plenario, a finales de octubre, cuando su oposición se reunificó y le ganó en las votaciones. Los críticos volverán a intentar ganarle el pulso a Villares en diciembre y tomar el control de En Marea. Si Villares pierde, su continuidad como portavoz parlamentario está en el aire. El regidor de Santiago, Martiño Noriega, ya advirtió de que podía ser apartado, si perdía en las elecciones primarias de diciembre.

Pancho Casal, diputado de Podemos en el Parlamento gallego, forma parte de la candidatura con que Luís Villares se presenta al Consello das Mareas. La incorporación de Pancho Casal, que en su momento fue próximo a las tesis de Antón Gómez Reino en el seno de la formación morada, es una de las sorpresas de la lista del actual portavoz parlamentario.

Otra de las novedades es la inclusión de la eurodiputada Lidia Senra. El equipo de Villares se desmarcó de la exlíder del Sindicato Labrego Galego, cuando en 2017 consideró que las vacunas eran "una práctica de riesgo" y que incluso "podían provocar la muerte en algunos casos".

La lista de Villares incluye a tres diputados autonómicos, además del propio portavoz parlamentario. Son el ya citado Pancho Casal, Paula Verao, de la formación Cerna, y Davide Rodríguez, crítico con la dirección de Anova.

El alcalde de Salceda, Marcos Besada, que fue antes regidor del BNG, y Xoán Hermida, de la Marea de Pontevedra, también forman parte de una lista, en la que Villares conserva los apoyos con los que en 2016 se hizo con el control de En Marea.