La Xunta y el Sindicato Unificado de Policía (SUP) coincidieron ayer en reivindicar el incremento de efectivos de la unidad de la Policía Nacional adscrita a la comunidad autónoma para que sus agentes puedan atender de una manera eficiente las labores que tienen encomendadas. En la actualidad, el número de efectivos policiales es de 396 de un total de 500. El vicepresidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, y el secretario del SUP en Galicia, Roberto González, mantuvieron ayer una reunión en la que se puso de manifiesto la actual situación de escasez de efectivos en esta unidad de la Policía Nacional que presta servicio en la autonomía.

Tanto Rueda como González demandaron la convocatoria de plazas para que se puedan cubrir las vacantes que en los últimos años han ido quedando vacías, principalmente por jubilación de los funcionarios policiales.

Esta salida de efectivos ha dejado a la unidad policial adscrita en "una situación muy complicada", como reconoció el vicepresidente de la Xunta en declaraciones a los periodistas al término de la reunión.

Rueda explicó que el número de agentes se ha visto reducido pero no así los servicios que tienen que prestar, como es el incremento del número de casos de protección a las mujeres víctimas de violencia machista o las tareas de vigilancia en casos de furtivismo y de incendios forestales.