El Parlamento de Galicia solicitará al Ministerio de Fomento y a Audasa que agilicen la tramitación de las reclamaciones presentadas por los usuarios de la AP-9 que se vieron afectados por las frecuentes colapsos que registró la autopista durante las obras de ampliación del puente de Rande. La Cámara también acordó con el respaldo de los cuatro grupos políticos que la conforman -PP, PSOE, En Marea y BNG- pedir al Gobierno central un protocolo que obligue a Audasa a levantar las barreras de los peajes durante las retenciones, una medida que ya planteó la Valedora do Pobo y que llegó a asumir para casos especiales el propio Fomento.

Los cuatro grupos alcanzaron un acuerdo a raíz de una iniciativa defendida por el Bloque. Al presentarla el diputado nacionalista Luis Bará censuró que Audasa haya encontrado un "filón inagotable" con los peajes de la AP-9, unos gravámenes que -criticó- van a "desangrar a los gallegos durante décadas" debido a los convenios tramitados o firmados durante los gobiernos del PP y PSOE.

Bará lamentó también que haya tenido que ser la Fiscalía la que abriese diligencias a Audasa "ante las reiteradas quejas por el atraco" a los usuarios de la autopista mientras por parte de las administraciones "no hubo ni un solo expediente informativo".

Tras la intervención del BNG tomó la palabra el diputado del PP Jacobo Moreira, quien -después de defender una enmienda formulada por su grupo que fue parcialmente aceptada por el Bloque- defendió que la Xunta "siempre mantuvo una actitud beligerante para lograr mejoras en el servicio" de la AP-9 a pesar de que la titularidad es estatal. Desde la bancada socialista Luis Álvarez planteó que se estudien indemnizaciones adicionales a los usuarios del vial por los trastornos ocasionados.