El alcalde de Santiago, Martiño Noriega, enmarcó las acusaciones del PP, que el miércoles denunció que varias empresas con "vínculos" con miembros del Gobierno local habían recibido un total de 16 contratos menores, en la "desesperación del clima preelectoral y en el traspaso de una línea roja", que lleva al PP a "instalarse en una infamia" y en la "difamación", atacando el "ámbito familiar y personal". "Y más allá de rechazar acusaciones y difamaciones, lo que me queda a mí y a mi entorno es defenderme en la vía judicial directamente", avanzó.

El regidor, de Compostela Aberta, aseguró que estudia presentar una denuncia a nivel personal por una "infamia" por la que "rompe relaciones institucionales" con el PP.

Por su parte, el portavoz del PP de Santiago, Agustín Hernández, acusó a Noriega de "amenazarlo" en su despacho. "Solo recibimos una llamada del alcalde a una reunión desagradable en la que lo único que recibí fue amenazas pero ninguna explicación", zanjó.