La huelga de Xustiza paralizó el año pasado los tribunales gallegos durante tres meses. Pese al refuerzo de los tribunales para poner al día las montañas de expedientes acumulados y los 17.000 juicios y actos jurisdiccionales suspendidos por el paro, los órganos judiciales de la comunidad están entre los más saturados del país. Los datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) colocan a Galicia en rojo en el mapa de congestión, ya que pese a la caída de los asuntos ingresados en 2018 -entraron un total de 302.278 causas, una media de 830 cada día, lo que supone un 5,5% menos los pleitos tramitados el ejercicio anterior-, los litigios en trámite se dispararon.
Los procesos resueltos se quedaron en poco más de 271.000 -poco mas de un millar por órgano-, pero al cierre de 2018 quedaban de 154.979 casos pendientes, un 21,3% más que hacía un año. Es decir, pese a la caída de la tasa de litigiosidad en los juzgados gallegos, el nivel de atasco se agravó. De hecho, son los segundos con la tasa de congestión más alta del país -1,59, solo por detrás de Castilla-La Mancha (1,62)- y casi un 10% por debajo de la media nacional (1,45) y los sextos con el índice de litigiosidad más bajo (111,9 asuntos por cada mil habitantes frente a los 128,2 del registrado en el conjunto del país ).
Este balance contrasta con la tendencia en los juzgados del resto del país, que en su conjunto recibieron un 2% más de litigios mientras que los que seguían en trámite repuntaron un 9,6%, casi 12 puntos por debajo del aumento experimentado en los tribunales gallegos.
Desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) advierten de que los datos estadísticos de 2018 han de ser interpretados teniendo en cuenta las consecuencias de la huelga de funcionarios que se prolongó durante tres meses. El paro, que comenzó el 7 de febrero y superó los 100 días también tuvo consecuencias en las sentencias dictadas por los jueces y magistrados en Galicia: 51.937, un 22% menos que las ejecutadas el ejercicio anterior. Al cierre de 2018 quedaban en los tribunales gallegos 125.103 fallos, casi 4.000 más que hace un año (+3,3%).
Comunidades
Las estadísticas del Poder Judicial sitúan los órganos judiciales gallegos entre los que menos litigiosidad presentan: 111,9 asuntos por cada mil habitantes, un balance que la coloca un 13% por debajo de la media nacional (128,2). En concreto, los juzgados de la comunidad ocupan el sexto puesto por la cola en volumen de pleitos per cápita, por detrás de La Rioja (88,7), Navarra (93,9), País Vasco (94,4), Extremadura (103,3) y Castilla-La Mancha (107,3).
Con el mayor índice de litigiosidad, los tribunales de Canarias lideran el ranking nacional (167,5), seguidos de lejos por los andaluces (145,1) y asturianos (136,2).
En cuanto a la congestión que soportan los tribunales del país, con una media de 1,45 (ratio resultante de los casos pendientes al inicio del periodo más los casos nuevos por los casos resueltos), los tribunales gallegos están entre los más sobresaturados, con un índice de 1,59, el segundo más alto de España y casi un 10% por encima de la media. En el extremo opuesto de la tabla de atasco judicial están los órganos de Navarra (1,27) junto con los de Asturias (1,32) y Aragón (1,35).
En la jurisdicción civil, el número de asuntos ingresados en Galicia el año pasado fue de 121.123, lo que supone un descenso del 0,5% respecto al ejercicio anterior. En este ámbito se resolvieron 101.251 pleitos, quedando en trámite al final del periodo 79.188, un 28,7% más. En el ámbito penal entraron 141.757 asuntos, un 10,3% menos que un año antes; y se resolvieron 134.189, quedando en trámite al final del ejercicio 43.036, un 16,8% más.
En la jurisdicción contencioso-administrativa se ingresaron 9.179 asuntos, lo que supone un incremento del 4,1%. En 2018 se resolvieron 7.832 casos (un 18,2% menos) y quedaron en trámite 7.364 (un 27,6% más). Por último, la jurisdicción social experimentó un descenso del 3,3%, hasta los 30.219. Estos órganos resolvieron 27.904 asuntos y dejaron pendientes 25.391, un 7,4% más que en año anterior.
