Vox genera expectativas en toda España tras su irrupción como partido decisivo en Andalucía, donde el PP enterró su discurso de que gobierne la lista más votada para poder alcanzar la Junta gracias a la fuerza ultraderechista y a Ciudadanos, que incluso se postuló para la Presidencia, pese a ser tercera fuerza y tener menos porcentaje de voto que Pedro Sánchez, al que consideran un "presidente okupa".

El partido de Santiago Abascal es una incógnita en Galicia, donde el CIS prevé que logre un escaño por A Coruña, donde cuenta con una pequeña base. El PP teme el efecto de los votos que les robe a la hora de distribuir los últimos escaños y la nota excéntrica la protagoniza su candidata en Ourense: Begoña Conde, tía del líder del partido y afincada en Vitoria. En Pontevedra Vox eligió al general del ejército en la reserva Antonio Budiño.