El director xeral de Enerxía e Minas, Ángel Bernardo Tahoces, tendrá que comparecer como investigado por un supuesto delito de prevaricación ambiental el próximo 2 de mayo en los juzgados Noia en relación con la reapertura de la mina de San Finx, en Lousame, a raíz de una petición de la Fiscalía.

Fuentes de la Consellería de Industria informan a Europa Press de que llegó esta notificación para que Tahoces acuda a declarar, al tiempo que este departamento dice "respetar" el trabajo de la justicia y se ofrece a "colaborar".

La Fiscalía de Medio Ambiente impulsa este procedimiento que lleva un juzgado de Noia, en el que es acusación particular la asociación ecologista Verdegaia.

Por su parte, fuentes próximas al caso consultadas por Europa Press explican que esta es una causa "muy compleja técnicamente", con intervención del Seprona y diversas periciales sobre contaminación, en la que se investigan supuestas irregularidades en la exoneración de requisitos y autorizaciones de la Xunta desde hace una década.

Preocupación por la calidad de las aguas

De hecho, en el pasado la Plataforma en Defensa do Mar (Plademar) de Muros-Noia mostró su preocupación por las "ilegalidades cometidas" por la mina de San Finx y su influencia en la calidad de las aguas.

Asimismo, sobre la mina de San Finx, en 2018 la ONU admitió a trámite una queja por "obstaculización" de la Xunta al acceso a la información en proyectos mineros.