El aprovechamiento de restos de la vid, matorral y kiwi para combustible, previa su transformación en pellets, es uno de los objetivos de un proyecto transfronterizo que desarrollan centros de I+D de Galicia y norte de Portugal. "La vid dio resultados prometedores, y el tojo puede tener posibilidades", destaca la investigadora de la Universidade de Vigo Araceli Regueiro. Por su parte, el kiwi "está dando problemas", pero su equipo seguirá testando con distintas composiciones.

La Universidade de Vigo trata de determinar cómo funciona cada tipo de combustible, para lo que, primero, ha puesto a prueba los pellets procedentes de restos de vid, matorral y kiwi en un quemador experimental. Después lo hará en calderas convencionales y realizará una comparativa con productos que ya están siendo comercializados. Examinan distintos parámetros como la suciedad que esta biomasa deja en los tubos o la formación de escorias en el fondo de las calderas, cuestiones que influyen en la eficacia de la producción de calor. También evalúan variables como las emisiones gaseosas y las partículas sólidas que se generan. Al respecto de los "resultados bastante buenos" que augura del matorral, Regueiro valora su funcionalidad teniendo en cuenta la cantidad en territorio gallego y portugués, y ya que "si se limpia el monte", al mismo tiempo, se evita que se inicien y propaguen más fácil los fuegos que cada año calcinan miles de hectáreas en ambos países. Con la primera fase del proyecto ya finalizada, la de selección y recogida de las biomasas, el análisis ha concluido que en la Eurorregión existen un millón de hectáreas de superficie con masas de matorrales sin arbolado, de las que Galicia tiene el 53% y el norte de Portugal el 47% restante. Dentro de las áreas con mayor concentración de matorrales están las provincias de Ourense y Lugo en Galicia, y Alto Tras-os-Montes y Douro en el norte de Portugal.

Y el proyecto, denominado Biomasa-AP, ha calculado que "la posibilidad anual de aprovechamiento de masas de matorrales en la región Galicia-Norte de Portugal podría alcanzar 1,5 millones de toneladas de biomasa en estado verde, que equivaldría energéticamente a más de 341.000 tonelada equivalente de petróleo.

Con una financiación de más de dos millones de euros y nueve socios (cinco gallegos y cuatro portugueses), la de Biomasa-AP será una de las iniciativas que aborde el encuentro que la red transfronteriza de la biomasa, que coordina Feuga, celebrará este martes en Santiago. La jornada contará con responsables de empresas y profesionales de la biomasa, a los que busca poner en contacto para favorecer intercambios, a nivel de investigación y negocio.