El Gobierno gallego ha aprobado esta mañana el Plan de Defensa de Incendios (Pladiga) dotado de 110,7 millones, que sumados a otras partidas de prevención y defensa contra incendios alcanzarán los 180 millones de euros. La Xunta extenderá de cuatro a cinco meses el trabajo de 900 brigadistas fijos-discontinuos, aunque la campaña de máximo riesgo seguirá siendo de julio a septiembre. A estos se sumarán los demás agentes al servicio de la Consellería de Medio Rural y de los concellos: un total de 5.824.

De ello ha informado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante la rueda de prensa posterior a la reunión semanal con su Ejecutivo. Así, ha precisado que, en total, trabajarán contra los fuegos 7.000 efectivos, una treintena de medios aéreos y 360 motobombas.

Asimismo, el dispositivo contará con drones que llevarán implantadas cámaras de vídeo y térmicas y se incrementará en un 35 por ciento el número de cámaras fijas --hasta las 118 unidades--. "Aproximadamente la mitad de superficie de nuestro territorio se podrá ver a través de cámaras fijas", ha destacado.