El secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, se mostró ayer convencido de que, "en Galicia, el PP tiene sus días contados" después del mal resultado cosechado en las elecciones generales del pasado 28 de abril.
Caballero se pronunció así en una entrevista concedida a RNE, en la que comentó la reciente victoria de los socialistas en estos comicios y sostuvo que, de conseguir una movilización similar en las elecciones del 26 de mayo, se producirá un cambio de ciclo político en Galicia.
El dirigente del PSdeG incidió en que, "por primera vez en la historia", su partido vence en escaños y votos obtenidos en este territorio, algo que ha dejado "noqueado" al PP y a un presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que "no sabe cómo reaccionar" para revertir esta tendencia.
"Ha sido un triunfo del socialismo gallego con claridad", sostuvo Caballero, que apuntó que el número total de votos de los partidos de izquierdas es superior al de los de derechas, gracias a que "el nivel de participación fue más alto que en muchas elecciones" recientes.
El pasado 28 de abril, el PP gallego "se encontró con una Galicia real que le dijo no a Feijóo" y que amenaza con poner fin a la "situación de control político" que los populares habían instalado sobre este territorio en el que pretendían consolidarse como la "única opción" de gobierno viable.
El líder del PSdeG llamó a que se repita el esfuerzo por votar "para conseguir que el PP pierda el espacio político" que tiene en Galicia y para castigar a "un mal presidente de la Xunta", que engañó con "mitos" y "publicidad" a sus ciudadanos. Además, Caballero le reprochó a Núñez Feijóo su "cinismo político" por cambiar sin miramientos de actitud con el Gobierno central en función de quien le ocupe, así como su tibieza a la hora de criticar a un partido de extrema derecha como Vox, con quien su partido pactó en Andalucía.
De acuerdo con sus palabras, el presidente de la Xunta "representa a la derecha" que estaba dispuesta a gobernar con Vox y "sigue representando a esa cabeza de la derecha reaccionaria que supone un riesgo de involución en Galicia".
