Ni las sanciones económicas ni la retirada de puntos del carné disuaden a los infractores. Cada día los agentes y los radares fijos imponen más de un centenar de multas al día en la red viaria de la comunidad que restan créditos por infracciones como exceder los límites de velocidad, conducir bajo los efectos del alcohol o drogas, atender el teléfono u otros dispositivos móviles o no usar los elementos de seguridad como el cinturón o los sistemas de retención infantil? El año pasado, más de 42.500 conductores gallegos „una media de 3.500 al mes„ perdieron puntos de su permiso de conducir por saltarse alguna norma de tráfico. Y como algún infractor acumula más de una sanción y cada incumplimiento acarrea el descuento de más de un crédito, el número de puntos retirados a lo largo de 2018 supera los 127.100, una media de 12.500 mensuales, según los datos facilitados por la Jefatura de Tráfico de A Coruña, desde donde además se realiza la coordinación de la Dirección General de Tráfico (DGT) en Galicia.

Velocidad. Saltarse los límites de velocidad es la norma que más incumplen los automovilistas de la comunidad y el año pasado 26.000 „el 60%„ fueron sancionados con la reducción entre dos y seis puntos del carné que suman un total de 65.688 créditos descontados, la mitad del total. Del total de multas por este motivo, el 82% se deben a infracciones graves que acarrean la máxima penalización con la detracción de seis puntos. Las estadísticas reflejan la incidencia de pisar más de la cuenta el acelerador en las cifras de accidentalidad y, la velocidad es uno de los factores determinantes en uno de cada cinco siniestros mortales. De hecho, la DGT, con el objetivo de reducir la accidentalidad, implantó desde enero la rebaja del límite de 100 kilómetros por hora a 90km/h en las carreteras convencionales, las de mayor peligrosidad ya que concentran más del 90% de los accidentes mortales en la red viaria gallega. En la misma línea, en Navarra, la Policía Foral apuesta por los radares en cascada „uno señalizado y otro más adelante sin avisar„ para que los conductores mantengan la velocidad permitida en todo el trayecto y no aceleren de repente al pasar el control.

Alcohol. Después de la velocidad, el alcohol es el principal motivo de retirada de puntos. En la comunidad gallega, el año pasado 3.780 conductores dieron positivos que derivaron en la retirada de 17.772 créditos. Unos 2.784 infractores (el 70%) perdieron cuatro, mientras los 1.106 restantes se quedaron sin cuatro debido al superar la tasa de 0,60 miligramos por litro en la prueba de aire.

Cinturón y dispositivos homologado para niños. No llevar el cinturón o carecer de la silla de retención infantil y hablar por el móvil figuran en el cuarto y quinto puesto respectivamente. Ambas infracciones casi duplican las multas impuestas por alcoholemias si se tiene en cuenta el número de sancionados: 3.255 en el primer caso y 2.993 en el segundo, un total de 6.248. Pero hay automovilistas que reciben más de una sanción por estos motivos, de forma que en el caso de viajar sin el dispositivo de seguridad superan las 3.360. Solo 524 menos que por dar positivo por alcohol.

Teléfono móvil. Los despistes por hacer una llamada, mandar un SMS o un wasap o navegar por internet derivaron en más de 3.000 multas. Los puntos detraídos por estos motivos „19.308„ superan a los retirados por exceder la tasa de alcohol permitida al volante. Por separado, rozan los 10.000 en cada caso, ya que tanto por utilizar el teléfono móvil como por no llevar el cinturón de seguridad se perdían hasta el año pasado tres créditos, y por dar positivo en el test de alcoholemia se pueden restar entre cuatro y seis según la gravedad. Una de las propuestas de la Dirección General de Tráfico en su reforma del sistema del carné por puntos pasa por quitar hasta seis créditos del carné de conducir por atender al móvil „el doble que ahora y los mismos que la conducción con alcohol„ y cuatro por no llevar cinturón o casco, uno más que en la actualidad. El ministro de Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska confirmó la semana pasada que será uno de los objetivos del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez.

Drogas. Los positivos en drogas representan la sexta infracción en las carreteras de la comunidad y la quinta que supone la retirada de más puntos con 8.970 menos el año pasado por 1.495 sanciones. Se castiga con seis créditos y 1.000 euros de multa si el narcotest detecta la presencia de sustancias estupefacientes como cocaína, opiáceos, cannabis, anfetaminas o metaanfetaminas. Unos 138 infractores fueron pillados más de una vez.

Casco. Los motoristas, junto con los ciclistas y peatones, son los colectivos más vulnerables en la red viaria. De ahí, la importancia de insistir en su seguridad y que usen todos los elementos a su disposición como los chalecos reflectantes en el caso de los viandantes o el casco en los conductores de motocicletas. Aunque no llevar casco supone la pérdida de tres puntos, los usuarios sancionados no alcanzan el centenar, y es una de las infracciones menos recurrente junto con los adelantamientos, con 68 multados.

Otras infracciones. Saltarse un semáforo en rojo supuso 1.576 multas el año pasado y como cada una de ellas se penaliza con cuatro puntos, se retiraron 6.304. El mismo número de créditos se descuentan por no respetar un stop, con 529 sanciones que supusieron la reducción de 2.116 puntos. La conducción temeraria (287 sanciones), no respetar la prioridad de paso (163) o circular con la licencia inadecuada (143) son otras de las infracciones por las que la Guardia Civil aplicó multas el año pasado en la red viaria.