El sector naval de la ría de Ferrol vuelve a ejecutar despidos en la industria auxiliar según acaba la actual carga de trabajo de los astilleros y hasta julio del próximo año perderán su empleo alrededor de 900 trabajadores si no hay más encargos, denunció ayer el presidente del comité de empresa de Navantia Ferrol, Javier Galán (CCOO). "En los departamentos de aceros, en donde ya se finalizó con el corte de la chapa, ya se empiezan a ejecutar despidos de un número importante de trabajadores y no podemos consentir que en esta comarca nos quedemos durante dos años sin ningún tipo de carga de trabajo y que va a suponer un aumento de los índices del paro", advirtió Galán.

Integrantes del comité de empresa de Navantia, de las federaciones de industria de CCOO, CIG, MAS y UGT, con delegados de la industria auxiliar, se reunieron ayer con el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, para denunciar la situación del astillero ferrolano y reclamar carga de trabajo. Galán recordó que los astilleros de la ría de Ferrol sufrirán una "una falta de ocupación desde el año 2020 y hasta 2022", cuando está previsto iniciar la construcción de las fragatas F-110 para la Armada Española.

A día de hoy están trabajando unos 1.300 operarios de la industria auxiliar y la plantilla de Navantia en la construcción de los dos buques AOR para Australia, y para el 30 de agosto está prevista la botadora de la segunda unidad.

"Desde ahora y hasta la botadura, unos 400 trabajadores perderán sus empleos, debido a la falta de trabajo", lamentó, y advirtió de que otros 500 operarios "serán despedidos hasta julio del próximo año, según se vayan finalizando las tareas".

Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, se comprometió a trasladar al Ejecutivo central la petición de los trabajadores de Navantia para que los astilleros tengan carga de trabajo previa al inicio de la ejecución de las fragatas F-110.