La Xunta aprobó ayer la modificación del reglamento de la Lei do Solo que flexibilizará la construcción en el rural. Se permitirá la edificación de viviendas para temporeros y también se podrán levantar albergues en el Camino de Santiago, aunque sea suelo rústico.Según argumenta la Xunta, esta modificación del reglamento de la Lei do Solo obedece a la necesidad de "dar respuesta a las necesidades detectadas durante la aplicación práctica de la norma", puesto que debido a la complejidad de la materia existían dudas en la interpretación de alguno de los artículos.

Una de las confusiones en la aplicación de la norma era la referente a la altura máxima permitida de 7 metros en las edificaciones tradicionales. La Xunta aclara que este límite se aplicará solo si se hacen ampliaciones. Sin embargo, si la casa tradicional ya supera ese tope no se le pondrán problemas para acometer obras.