El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, advirtió la semana pasada de que los 700 millones de euros que el Estado debe a la comunidad "pueden condicionar" el pago de las nóminas de los funcionarios y de los servicios de los proveedores a finales de año. Sin embargo, por ahora Galicia es la Administración autonómica que antes pagó las facturas a los autónomos en el primer semestre. Solo tardó 18 días, 17 menos que los 35 de la media autonómica y 12 jornadas antes de los 30 de plazo máximo que fija la ley. Según el estudio de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), después de Galicia, Andalucía y País Vasco son las autonomías más cumplidoras al tardar 20 días en saldar sus deudas. Por el contrario, Cantabria, con 56 jornadas „casi el doble de lo permitido„, Comunidad Valenciana, con 51 días, y Baleares, con 45, son las autonomías que más tarde pagan a sus proveedores. El informe se fija también en la demora de las diputaciones. La de Cuenca es la más rápida a la hora de pagar los trabajos y lo hace en siete días. Y la de Valencia es la que más se retrasa en pagar, abonando sus facturas con 53 días de espera. En Galicia, las cuatro instituciones provinciales cumplen con la ley. La diputación lucense es la que antes salda sus facturas al tardar 11 días, tres menos que los 15 de A Coruña, mientras que en Pontevedra el periodo es de 19 jornadas y en la de Ourense de 28.

El estudio constata que la Administración local es "la peor pagadora" con 65 días de promedio a nivel estatal, más del doble del plazo legal. Entre las grandes ciudades gallegas solo pagan por debajo de los 30 días Lugo y Vigo con 11 y 12 jornadas. Pontevedra tarda justo un mes, dentro del límite, mientras que A Coruña se pasa por ocho días. Los peores datos se dan en la capital gallega y en Ourense, donde el retraso llega a las 53 y las 64 jornadas respectivamente. De Ferrol no aparecen datos en el informe.