Las Fuerzas Armadas desarrollan desde hoy y hasta el próximo 30 de septiembre una "operación de apoyo" denominada Centinela Gallego, consistente en establecer un despliegue de patrullas y medios aéreos de vigilancia para contribuir a la prevención de incendios forestales. Según destacó la Brilat, "no ha habido incendios en ninguna de las zonas donde ha patrullado".

El responsable militar de esta operación, el jefe de la Brigada Galicia VII (Brilat), el general Antonio Romero Losada, respondió ayer en rueda de prensa a las críticas por la contratación del ejército por 500.000 euros sólo para "labores de vigilancia y disuasión". Así, afirmó que, a diferencia de una persona particular, ellos lo hacen "durante las 24 horas del día". "La ciudadanía llega un momento que se acuesta y nosotros seguimos vigilando durante toda la noche", aclaró.

Según señaló el general Romero Losada, los militares aportan "un plus que no puede hacer cualquier ciudadano" y destacó que "la eficacia la demuestra la propia estadística" lo que le ha valido para asegurar que "no ha habido incendios en ninguna de las zonas donde ha patrullado la Brilat".

"No somos todopoderosos", añadió Romero Losada, aunque convino que "evidentemente la seguridad cien por cien de que no se va a producir un incendio nadie la puede garantizar". En esta presentación desarrollada en la Base de la Brilat en Pontevedra también participó el conselleiro de Medio Rural, José González, que abundó en la respuesta del general Romero Losada para incidir en que "si uniformes y coches del ejército no tienen más trascendencia que particulares vigilando nuestros montes algo falla" dijo respecto a la "sensación de autoridad mucho más intensa" que, a su juicio, transmiten los militares. Por su parte la subdelegada del Gobierno en la provincia, Maica Larriba, consideró que es "fundamental" su presencia "para incidir en la prevención", algo que cobra especial peso "en un contexto en que dos tercios de los incendios del verano son intencionados", afirmó.

En este sentido, José González quiso "lanzar una advertencia clara a los incendiarios". "Vamos a por ellos", subrayó, y citó el despliegue de drones „vehículo aéreo no tripulado„, cámaras de vigilancia o el "teléfono anónimo de denuncia". "Entre todos buscamos detectar actividad incendiaria para poder llevar a estos delincuentes ante la Fiscalía", remató el conselleiro.