La unión hace la fuerza reza un dicho popular. Y bajo esta premisa, el PPdeG alienta "un frente común" de las comunidades para exigir al Gobierno de España que libere los fondos retenidos y que ascienden a unos 7.500 millones de euros, si incluimos los adelantos a cuenta de la financiación autonómica y los ingresos pendientes de la recaudación del IVA. En el caso de Galicia, son 700 millones de euros, de los cuales 530 millones ya estaban previstos en las Cuentas de este año, y ahora la Xunta se encuentra que no puede disponer de ellos, pero programó gastos a su cargo.

El Ministerio de Hacienda volvía a remarcar ayer que no traspasa esos fondos porque está en funciones y sus Servicios Jurídicos le han advertido de que no puede. Podrá hacerlo vía decreto y de forma urgente si hay un nuevo Gobierno con plenas funciones. Por ello, desde el departamento de María Jesús Montero les parece "contradictorio" que comunidades del PP, como Galicia, pongan el grito en el cielo por la falta de fondos, pero luego respalden que su partido no ayude a desatascar la investidura de Pedro Sánchez.

La guerra política a cuenta de la financiación autonómica pendiente se recrudeció ayer. El secretario general del PPdeG, Miguel Tellado, incidió en que la Xunta no descarta sumarse al recurso contencioso administrativo que anunció un día antes la Generalitat de Catalunya o presentar el suyo propio. También remarcó que la iniciativa para exigir a Moncloa la liberación de los fondos hacia las comunidades fue de Galicia, y no de Cataluña.

El número dos del PPdeG afiló sus dardos contra el secretario xeral del PSdeG y candidato a la Xunta, Gonzalo Caballero, al acusarlo de "ser cómplice del ultraje" de Pedro Sánchez a Galicia y de "traicionar" a la comunidad, cuyos intereses debe defender.

Tellado consideró "inaceptable" que los socialistas gallegos sean "sumisos" al Gobierno de Sánchez y "aplaudan y defiendan el chantaje" del presidente en funciones.

El secretario xeral del PPdeG contrapuso al PSOE gallego con los socialistas de Asturias, Valencia y Extremadura, que en su opinión "defienden mejor los intereses de Galicia que el PSdeG", pues han urgido a La Moncloa a buscar fórmulas para liberar esos fondos cuanto antes.

Si hay repetición electoral, la formación de nuevo Gobierno podría demorarse hasta 2020, y como mínimo las comunidades se verían forzadas a endeudarse para obtener liquidez, o a aplicar recortes en el gasto. La situación se complicaría porque elaborar las Cuentas de 2020 será más difícil para las autonomías, si no saben cuántos fondos del Estado van a recibir.

Gonzalo Caballero, a su vez, se mostró muy crítico con la Xunta y los populares. El líder de los socialistas gallegos instó a Alberto Núñez Feijóo a "dejar de contar una película" sobre los 700 millones de euros que reclama al Gobierno central.

"El presidente de la Xunta lleva todo el verano contando una película sobre las dificultades económicas que tiene Galicia, a la vez que gasta 30 millones de euros en reformar despachos en San Caetano", en alusión a la reforma del complejo administrativo de la Xunta en Santiago.

Gonzalo Caballero, que ayer visitó una granja ecológica en Paderne, denostó que, en su opinión, Feijóo ponga a la Xunta al servicio de los intereses del PP.

También le recriminó que en su estrategia de confrontación con el Gobierno de Pedro Sánchez no le importe aliarse con los independentistas catalanes. Cuestionó "los bandazos" de Feijóo que un día, dijo, aplaude a VOX y otro a Quim Torra.

Gonzalo Caballero defendió que "la mejor garantía para la financiación de las autonomías es la garantía que da el Gobierno de Pedro Sánchez".

Por su parte, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, se alineó con la ofensiva de la Xunta, pero invitándole a seguir la estela de Cataluña y presentar ya un recurso judicial" contra el Estado para que el Gobierno de Pedro Sánchez libere los pagos por la financiación autonómica.

Pontón pidió a Feijóo que también reclame 200 millones de euros en materia de dependencia, "que ya se deben desde la época de Rajoy" y los "más de 2.000 millones de euros que durante los últimos años se presupuestaron pero no se invirtieron en la mejora del ferrocarril en nuestro país".

"Galicia necesita a un presidente que ejerza como tal y Feijóo no está a la altura", lamentó la dirigente nacionalista.