La Dirección General de Pesca Marítima decretó ayer el cierre "cautelar" de la zona de producción de la ría de Ribadeo para todas las especies explotables por un vertido de purines detectado el domingo, según informó el Gobierno asturiano. La medida se adoptó mientras se realiza la toma de muestras y su análisis por el laboratorio de Salud Pública y el Ejecutivo asturiano espera los resultados definitivos para conocer si los moluscos están contaminados. El Gobierno asturiano subraya que trabaja para levantar el cierre decretado en la zona de cultivo de la ría a la mayor brevedad posible cuando se emita un informe favorable. Además, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico ordenó instalar barreras anticontaminación a lo largo de dos kilómetros del río.

El vertido lo detectó el pasado domingo en su depósito de purines el dueño de una ganadería ubicada en Guiar, en el municipio asturiano de Vegadeo, quien alertó a los servicios de emergencia de que los residuos se estaban vertiendo al arroyo Ouría, un afluente del Eo, cuya ría ejerce como límite natural entre Galicia y Asturias. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico y la Guardia Civil estudian el origen y tratan de averiguar qué sucedió para depurar responsabilidades. Según pudo saber este diario, el ganadero se encontró con una tubería rota de la balsa de purines a primera hora de la mañana del domingo. De inmediato, contactó con el ayuntamiento de Vegadeo y se iniciaron la tareas para tapar el agujero. Pese a la rapidez con que se actuó, no se pudo evitar el vertido de entre 300.000 y 350.000 litros de estiércol y desecho animal, según estima la Confederación.

Según los servicios de emergencias de Galicia, el vertido se elevaría a unos 500.000 litros, mientras que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico confirmó que en las últimas horas se avanzó en su contención y que hoy se podrían tener los primeros resultados de las muestras.

El alcalde en funciones del municipio lucense de Ribadeo, Pablo Vizoso, pidió a vecinos y turistas que no se bañen en las playas de Os Bloques y O Cargadoiro, situadas en la desembocadura del Eo, hasta que se confirme la posible afección de las aguas. Vizoso, no obstante, mandó un mensaje de "tranquilidad", pues el vertido se localiza "más abajo de la captación de aguas para consumo humano de Vilarbetote", ya en el municipio vecino de Trabada.