El Consorcio de As Mariñas hizo a principio de mes un llamamiento a la ciudadanía para terminar con la práctica perniciosa de depositar enseres, muebles o escombros en lugares no permitidos. El verano es propicio para deshacerse de los materiales voluminosos en lugares que, a priori, escapan a la vista. Vigilar que esto no ocurra es una competencia municipal. No obstante, la Consellería de Medio Ambiente echa una mano y atiende "la práctica totalidad de las solicitudes" que los municipios le trasladan para recuperar esos espacios degradados. En lo que va de 2019, la Xunta ha eliminado 73 puntos de vertido incontrolado en la comunidad. El año pasado fueron 176, con lo que la merma se sitúa en torno al 58%. Con atención a los datos de la provincia coruñesa, la caída ha sido mayor, cercana al 81%, al transitarse de las 67 a las 13 actuaciones en la actual anualidad.

Realidad mudable

El carácter mudable de esta realidad complica que se pueda realizar un inventario de todos estos puntos. Las estadísticas de Medio Ambiente permiten dimensionar el problema. "Está previsto que el número de puntos de vertido incontrolado eliminados por la Xunta al remate del período 2009-2019 alcance el millar", indican desde la consellería. Lo cierto es que ya se ha superado esa previsión. La suma de las intervenciones desplegadas en la comunidad desde 2009 ha alcanzado las 1.034 a 3 meses de despedir este año.

En 2019, en el capítulo económico, la Xunta ha invertido más de 400.000 euros para sellar los 73 vertederos sitos en las provincias de A Coruña (13), Lugo (22) y Ourense (38). Ninguno en Pontevedra hasta la fecha. A esta cuantía se añadirán antes de que acabe el ejercicio otros 242.000 euros "para recuperar espacios naturales degradados, especialmente los que se encuentran en zonas protegidas de la Rede Natura".

En la década 2009-2019 la factura destinada a la erradicación de los focos de basura sin control superará los ocho millones de euros.

La naturaleza de los residuos retirados en los puntos de vertido incontrolado, afirman desde la Xunta, "es muy amplia". Se trata sobre todo de elementos de origen domiciliario en muy mal estado "por lo que su reciclaje no resulta posible".

Para ayudar a los concellos en la gestión de los residuos urbanos, el Gobierno gallego convocó este año la primera línea de ayudas para entidades locales destinada a la implantación de puntos limpios móviles. Treinta administraciones locales y de carácter supramunicipal, (el Consorcio de as Mariñas es beneficiario) se aprovecharán durante este año de la implantación de estos puntos que cuentan con compartimentos para mejorar la recogida y la clasificación de los deshechos especiales.