La titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, Pilar de Lara, permanecerá al frente del mismo, hasta "por lo menos" el mes de "enero", pese a la sanción impuesta por el pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de siete meses y un día, que supone pérdida de destino. Así lo manifestó el abogado de la juez, Agustín Azparren, quien confirmó ayer que todavía no se le ha notificado la sanción, que fue ratificada en pleno por el órgano de gobierno de los jueces el pasado 26 de septiembre.

"La única noticia es la que tuvimos por la prensa el día del pleno y todavía no se ha notificado la resolución. Normalmente se hace un acuerdo en el pleno y después hay que redactarlo y tarda unos días, pero no tengo ni idea de lo que se puede tardar. A partir de la notificación empieza a correr el plazo de dos meses para presentar recurso ante el Tribunal Supremo", explicó.

Pilar de Lara, aseguró su abogado, aún dispondría, desde que se le comunique formalmente la sanción, de dos meses, "que es el plazo máximo", para preparar "el recurso" ante el Tribunal Supremo.

Azparren avanzó que "cuando se anuncie la interposición del recurso también se va a solicitar la suspensión de la ejecución de la sanción". "Eso suele tardar sobre un mes para ver si se suspende la ejecución o no", comentó.

"Si se hace ejecutiva la suspensión, casi por las fechas en las que estamos estaríamos hablando de primeros de enero" de 2020, apuntó el letrado en relación a cuando empezaría a aplicarse la sanción.

Recurso

En cuanto al recurso ante el Tribunal Supremo, la defensa de la magistrada expondrá prácticamente los mismos argumentos expuestos hasta ahora para paralizar la sanción por dilación. "Ha habido muchos escritos, las razones fundamentales sobre desatención no encajan dentro de este tipo disciplinario", apostilló el abogado Agustín Azparren, quien adelantó que aportarán "otros motivos".