La candidata de Galicia en Común al Congreso, Yolanda Díaz, reclamó ayer que la planta de gas de Reganosa en Mugardos "salga de la ría de Ferrol" al señalar que es "un peligro ambiental" para la vida de los ciudadanos.

En un comunicado, aseguró que su proximidad a "viviendas habitadas y núcleos de población" la convierten en "una auténtica bomba de relojería". Para la parlamentaria, son "premisas irrenunciables" defender "la vida, la legalidad jurídica y la seguridad ambiental en la ría de Ferrol".

Por ello, apostó por "un futuro para la ría sin una planta regasificadora alojada en su interior" y estimó que la compañía "es un ejemplo de corrupción política y empresarial sostenido e intolerable".

Así, citó el inicio en la Audiencia Provincial de A Coruña del juicio contra dos exaltos cargos de la Xunta, "accionista mayoritaria de la planta", que han sido "acusados por la Fiscalía de falsear documentos y ocultar informes contrarios" al dragado de la ría. "Socavó el fondo pese a que técnicos advirtieron de su impacto negativo", reseñó.

Según Díaz, se trata de una operación que fue ideada para facilitar el tránsito de los gaseros hasta Punta Promontoiro y que se realizó con explosivos para demoler agujas de roca en el otoño de 2011 e indicó que el entorno es "un espacio protegido ambientalmente como Lugar de Interés Comunitario".

Cinco sentencias

La parlamentaria consideró que ya se acumulan cinco sentencias del Tribunal Supremo que le dan la razón al Comité Ciudadano de Emergencia de la ría de Ferrol.

"A pesar de eso, tanto el PP como el PSOE intentaron legalizar una bomba de relojería en el interior de la ría", añadió la candidata de Galicia en Común.

Además, subrayado que la instalación fue impulsada fundamentalmente por el Gobierno gallego de Manuel Fraga y el grupo Tojeiro, propietario de Gadisa, a finales de los noventa.