Un negocio de contrabando de tabaco por valor de más de 72 millones de euros. Esta es la cifra que fija el Tribunal Supremo para el tabaco importado ilegalmente por la red internacional atribuida al exalcalde de Ribadumia José Ramón, Nené, Barral. En un auto, por el que se acuerda la inhibición del Juzgado de Instrucción 1 de Lugo, que inició la investigación, en favor del Juzgado Central 6 de la Audiencia Nacional, el magistrado Pablo Llarena sostiene que: "Nos hallamos ante la existencia de indicios claros de la comisión de delitos de contrabando de tabaco, de falsedad y blanqueo de capitales, llevados a cabo por una organización criminal".

La Sala sostiene que la organización, es supuestamente dirigida por Nené Barral, residente en Galicia, pero "contando con la colaboración miembros integrantes de la misma, tanto desde distintos puntos de España (Navarra, Extremadura, Cataluña o Valencia) como desde el extranjero". Además, se estrían utilizando "redes e infraestructuras obrantes en distintos países de la unión Europea (como Portugal o Grecia) y extracomunitarios (como Estados Unidos, Emiratos Árabes y China)". El Supremo acuerda la inhibición del juzgado de Lugo en favor de la Audiencia Nacional: "Ante la repercusión que estos hechos pueden representar par ala economía nacional la seguridad del tráfico mercantil".

El tabaco ilegal, según el auto, llegaba en contenedores a los puertos españoles de Barcelona y Valencia, y al portugués de Sines (Portugal) procedente de EEUU, otras veces vía Grecia y en tercer lugar por la vía asiática, caso de Emiratos Árabes.Para llevar a cabo el contrabando de tabaco se falsificaron múltiples documentos, según el Supremo.

Nené Barral, que tiene 81 años y estuvo durante 18 años al frente de la Alcaldía de Ribadumia, figura como investigado con varios socios en el marco de la operación Cebra, dirigida por la juez Pilar de Lara en 2016 por presuntos delitos de contrabando de tabaco, delito fiscal y blanqueo.