Cecilia se aleja de Galicia. La fuerte borrasca que en los últimos días ha traído al otoño gallego un tiempo más propio del invierno dio ayer sus últimos coletazos con olas de 9 metros y picos puntuales de 14 en punta Langosteira, y vientos de 85 kilómetros por hora en Vimianzo y puntos de A Mariña. La alerta en el mar, que ayer se rebajó de roja a naranja, se atenuó la pasada madrugada para situarse en nivel amarillo. El fenómeno meteorológico adverso continuará perdiendo fuerza en las próximas horas pero dará paso a un nuevo episodio de precipitaciones hasta el lunes. A última hora de ayer, el 112 mantenía el aviso por nevadas moderadas en la montaña de Lugo donde hay que extremar la precaución al volante en la A-6. a su paso por Pedrafita do Cebreiro.
Los efectos más notorios del temporal invernal que azotó el jueves la comunidad empezaron a atenuarse ayer, aunque darán paso a un fin de semana de precipitaciones, que podrán ser de nieve por encima de los 900 metros. La jornada de ayer dejó evidencias de que el huracán Cecilia no quiere abandonar de golpe estas latitudes. Si el jueves se registraban vientos de más de 120 km/h en A Costa da Morte y las olas en punta Langosteira superaron en momentos del día los diez metros (con picos de 14), la jornada de ayer dejó olas de 8 o 9 metros con picos más altos por momentos, y vientos máximos de 82 km/h en Vimianzo y de 85 en Penedo do Galo, en Viveiro. La situación permitió rebajar las alertas instauradas en jornadas anteriores. Si bien, a última hora de ayer, el 112 mantenía la de color amarillo en el litoral de la comunidad y limitaba a los ríos Eume, Ouro, Covo, Landro y Tambre el aviso por "desbordamientos puntuales" a causa del incremento del caudal.
La acumulación de nieve de hasta 20 centímetros en puntos de la montaña de Lugo y más débiles en el sur de la provincia de Ourense dejó ayer a 850 alumnos sin clase.
La DGT mantenía anoche la prohibición de que camiones y vehículos articulados circulasen por la carretera OU-122 por culpa de la nieve caída entre los puntos kilométricos 11 y 26. Además se hace conveniente extremar la precaución en la autovía A-6 en Pedrafita do Cebreiro, por nevadas.
El frío fue una constante ayer en casi toda la comunidad. Las temperaturas más gélidas se sintieron en a Veiga (Ourense) con -5,1 grados y en Manzaneda, donde se alcanzaron los 4,8 bajo cero.
Durante la jornada de hoy habrá una tregua, aunque durará poco ya que a partir de la tarde llegarán las lluvias y chubascos a las provincias atlánticas. La cota de nieve, que la pasada madrugada se situó en los 800 metros subirá a los 1.200 a medida que pasen las horas. Eso sí, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anuncia que la bolsa de aire frío "va a ir desapareciendo" para dar paso a una situación meteorológica más propia del otoño.
