El buque 'Blue Star' aguarda en la zona de As Mirandas, en la costa de Ares (A Coruña), que se pueda iniciar el vaciados de sus tanques de fuel y gasóleo, paso previo requerido por las autoridades a la empresa contratada por la armadora para iniciar la siguiente fase, las tareas de rescate del barco.

Según las estimaciones del plan de rescate, que dio a conocer el lunes el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, estas tareas estaban previstas para este martes, condicionadas a las condiciones climatológicas y también a la llegada de los medios técnicos y humanos necesarios para esta labor, algunos de los cuales tienen que viajar desde Róterdam (Holanda).

La tarea busca retirar del buque encallado las 105 toneladas de combustibles que tiene en su interior, de las cuáles 60 son de gasóleo y 45 de fuel.

En cuanto a las condiciones del mar, a partir de las 15,00 horas de este martes está decretada la alerta naranja para esta zona, debido a la intensidad de las olas y vientos, una situación que dificultará la labor sobre todo en el buque, ya que una de las opciones que se baraja para trasladar las mangueras al barco es la utilización de un helicóptero.

Por otra parte, el acceso de los camiones cisterna a la zona también entraña alguna complicación, sobre todo porque a este lugar no llega ningún acceso asfaltado, por lo que cabe la posibilidad de que se realicen obras de urgencia para conseguir estabilizar el terreno y permitir la salida de los camiones cargados con los carburantes.

LA TRIPULACIÓN CONTINUA EN EL INTERIOR

Mientras en tierra se continúan con los preparativos, en el interior del buque quimiquero continúan los dieciséis integrantes de la tripulación, que en ningún momento han abandonado la nave desde que se produjo su encallamiento.

El 'Blue Star' tiene bandera de Malta pero en el navío conviven trabajadores de India, Birmania y Ucrania. Todos ellos permanecen en buen estado de salud y tienen previsto colaborar con los equipos externos en las tareas de vaciado de los tanques de fuel y gasóleo, que por otra parte supondrá dejar sin suministro eléctrico el barco una vez agotadas las baterías que previamente hayan sido cargadas.

INCIDENTE

El encallamiento se produjo sobre las 23,50 horas del pasado viernes, 22 de noviembre, en la zona de Punta Miranda, entre las playas de Barrosa y A Canteira.

El barco tuvo un problema en la máquina, un incendio en la zona de la chimenea, cuando salía del fondeadero de Ares para tomar práctico y entrar en A Coruña, pero la avería lo dejó a merced del viento y las olas, hasta que tocó tierra.

El barco procedía de Bilbao para cargar en la terminal de Repsol de A Coruña 6.000 toneladas de algún producto químico sin especificar.

Tras quedar embarrancando, el primer intento para rescatarlo se produjo al mediodía del sábado, día 23, coincidiendo con la pleamar, pero las estachas que lo unían a dos remolcadores, 'Don Inda', de Salvamento Marítimo, e 'Ibaizabal Nueve', se rompieron en el momento que iniciaron la tarea de remolque.

Más de doce horas más tarde, en la siguiente pleamar, a las dos de la madrugada del domingo, con la utilización de nuevas estachas y más reforzadas, se volvió a intentar una nueva operación, que también tuvo que ser abortada tras la rotura de las estachas de uno de los remolcadores.

La tercera, prevista para el mediodía de esta misma jornada, 24 de noviembre, fue abortada una dos horas antes, tras anunciar el armador la contratación de empresa holandesa SMIT Salvage, que es la encargada de presentar ante las autoridades el plan de rescate para retirar el buque de donde ha quedado atrapado.