Primero se acometerá la retirada del combustible que porta el quimiquero Blue Star „que permanece encallado en una zona rocosa de la ría de Ares desde medianoche del pasado viernes„ y después, vendrán los trabajos de reflote del buque. Esta es la secuencia trazada ayer mismo por el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, quien ha reconocido la dificultad del operativo tras ser informado "verbalmente" de los planes previstos por la naviera.

La prioridad apuntada por el Gobierno consiste en la extracción inicial de las 45 toneladas de fuel y de otras 60 de gasóleo que se encuentran a bordo. Ayer mismo se trasladó el material necesario a la zona del siniestro. La idea es empezar hoy con la operación "si es posible". Los tiempos, indicó Losada, los marcan "los técnicos, la seguridad y las condiciones meteorológicas". Estas últimas podrían condicionar el operativo, habida cuenta de que la costa coruñesa se encuentra hoy en alerta naranja por temporal en el mar.

El combustible se retirará del buque por un sistema de mangueras conectadas a camiones cisterna desde tierra. El armador del buque ha contratado para esta misión a la empresa holandesa Smit Salvage, la misma que remolcó en su día el Prestige y colaboró en el rescate del Costa Concordia en aguas del Mediterráneo. Aunque ya se han desplazado a la zona recursos humanos y materiales, en las próximas horas se prevé la llegada de más medios desde Rotterdam. La firma holandesa estará apoyada por otra española, especifica el representante del Gobierno, quien indica que el operativo cuenta en todo momento además con los medios del Estado.

Durante las últimas horas, los técnicos han estado evaluando a bordo la situación para iniciar la succión del combustible. El delegado del Gobierno asegura que "se sigue chequeando continuamente" el estado del buque y que no se han producido novedades. El chequeo se está llevando a cabo tanto por parte de la tripulación del barco como por medios oficiales.

Javier Losada envió un mensaje tranquilizador a las poblaciones cercanas. "Estamos tranquilos, se están haciendo las cosas acorde a lo que dicen los técnicos". Se mantienen además en alerta los puertos de A Coruña y Ferrol, por si fuese preciso reaccionar de manera inmediata.

La tripulación, integrada por 16 personas, permanece a bordo del Blue Star desde el primer día, por si fuese precisa su intervención para las labores previstas. El capitán especificó que son necesarios para la realización de ciertos movimientos en el buque.

Tal y como afirmó Javier Losada, en cuanto lo soliciten, se podrá proceder a la evacuación pues, lo primero, indicó, "es evitar catástrofes humanas y en el territorio".

Las fuentes del Gobierno expresan que sobre todo el reflotamiento del barco será una "operación compleja" para la que todavía no se puede precisar el número de medios necesarios. Los medios del Estado dan apoyo continuo y el Ministerio de Fomento ha puesto en marcha su propio operativo de contingencia, relató el delegado.

El Gobierno ha solicitado a la empresa que reporte cada doce horas los movimientos y el desarrollo del operativo.

Losada se reunió ayer en A Coruña con la secretaria general de Transportes del Ministerio de Fomento, María José Rallo, y con los responsables de la Sociedad Estatal de Salvamento y Seguridad, Capitanía Marítima, la naviera y la empresa Smit Salvage que se encarga del operativo. Durante el encuentro se cerró el compromiso de la armadora con la extracción del combustible. El Gobierno confía en que en pocos días la situación esté resuelta.

El barco siniestrado está en la zona rocosa de As Mirandas, que hace muy complicado que se pueda deslizar. Quedó tan incrustado en las rocas, que tiene las hélices bloqueadas por el suelo marino. Según informó ayer el alcalde de Ares, Julio Iglesias, As Mirandas es "el peor sitio" para este caso. Iglesias trasladó la "preocupación evidente" de la ciudadanía de Ares ante el operativo e informó de que en la tarde de ayer el buque tenía "la proa prácticamente en el aire" y se encontraba en una posición "compleja", azotado por el mar en un costado que lo "enclava" más en los fondos. Esta inquietud, justificó, es la que motiva la presencia de cientos de curiosos en el litoral estos días.