Por primera vez en los últimos ocho años, aumenta el número de ayuntamientos gallegos en los que la población extranjera supera el 5% del total. Este cambio es consecuencia del incremento de foráneos empadronados en Galicia después de cinco años de descensos. A finales de 2018, había 25 concellos en los que vivían, al menos, un 5% de extranjeros. Son cuatro más que el ejercicio anterior. Aunque estos 25 solo representan el 7,9% de total.

En los últimos años, el número de ayuntamientos gallegos cuya población extranjera superaba el 5% se había desplomado casi a la mitad. De los 36 que había en 2010 se había pasado a los 19 de 2015 debido a la marcha de foráneos a otras comunidades o a otros países.

En 2014, por primera vez desde que arrancó la crisis, la cifra de extranjeros en la comunidad se quedó por debajo de los 100.000. En 2008 había censados más de 95.000. En el quinquenio siguiente, el número se mantuvo por encima de los 105.000. Sin embargo, en 2017 cayó hasta los 87.189, tras cinco años a la baja. Pero en 2018 hubo un repunte del 6,1% hasta los 92.558 y los últimos datos que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística han elevado la cifra por primera vez desde 2013 por encima de los 100.00 (100.524).

Esta llegada de extranjeros ha traído como consecuencia que los concellos que contaban con más de un 5% de ciudadanos foráneos hayan aumentado. En este listado de 25 de municipios no está ninguna de las siete grandes ciudades „Lugo aparecía en la de 2014„; solo uno supera los 20.000 habitantes (Lalín); otros siete tienen más de 10.000 (O Porriño, Monforte de Lemos, Tui, Viveiro, Verín, O Barco y Foz); casi una docena cuenta con menos de 2.000 y la gran mayoría son municipios de comarcas del interior de la comunidad.

Las provincias de Ourense y Lugo concentran el 80% de estos municipios que en los que más del 5% de sus habitantes tienen nacionalidad extranjera. En Lugo son 10 de los 25: Negueira de Muñiz, Rábade, Burela, Viveiro, Ribadeo, Meira, Monforte, Foz, Lourenzá y Pantón. Con respecto a 2017 pasan de siete a diez al entrar en la lista los tres últimos.

La provincia de Ourense cuenta con otros 10: Entrimo, Lobios, Baltar, Padrenda, O Barco, Carballeda de Valdeorras, Oimbra, Verín, A Gudiña y A Mezquita. En todos, la gran mayoría son de nacionalidad portuguesa. Le sigue Pontevedra con cuatro municipios: Tui, Salvaterra, Lalín y O Porriño, y A Coruña, con uno: Cedeira.

Los 25 ayuntamientos en los que más del 5% de sus habitantes son de otras nacionalidades son una excepción en una comunidad en la que los ciudadanos extranjeros representan el 3,4%.

La otra cara de la moneda son los cuatro concellos „tres de la provincia de A Coruña y uno de la de Lugo„ en los que el porcentaje de vecinos que no tienen la nacionalidad española es mínimo. Por debajo del 0,5%. Son poblaciones, la mayoría pequeñas (ninguna supera los 4.000 habitantes), en las que hay empadronados menos de una quincena de extranjeros.

Los casos más extremos son Dodro, Cervantes, Muras, Beade, San Xoán de Ríos y Larouco en los que los habitantes de otras nacionalidades no superan las siete personas.

El colectivo más numeroso de extranjeros en Galicia es con diferencia el de los ciudadanos portugueses, que suman 14.500, seguidos de los venezolanos, que rozan los 10.000, y de los brasileños que ya superan los 8.600 empadronados.