Expertos de la Red Local de Administración Pública (Red Localis) consideran que el marco normativo español es "profuso" y "completo", aunque "complejo" en la regulación de las prestaciones y echan en falta cierta transparencia, así como mecanismos de control. Además, consideran que la moda de la recuperación de la gestión directa de los servicios públicos de los concellos gallegos, que nunca dejaron de ser municipales, pero que antes estaban externalizados a otras empresas, "se ha ido apagando paulatinamente", según el informe "La remunicipalización de los servicios públicos locales. ¿Prestaciones públicas o privadas?".

El documento elaborado por la profesora de Economía de la USC, María Cadaval, y el jefe de servicio de asistencia económica-presupuestaria de la Diputación de Cáceres, Álvaro Casas, para Red Localis, concluye que ola de la remunicipalización de las prestaciones públicas (alumbrado, recogida de residuos o abastecimiento de agua) se ha ido apagando tras los comicios municipales de 2015 en las que irrumpieron las "mareas". El informe, que prefiere denominar a ese proceso como "reinternalización", repara que esa reconversión debe estar únicamente motivada por una dirección más "eficaz, eficiente y sostenible", como cuando el gestor privado deja de comportarse como un socio y pasa a hacerlo como un monopolista, e insisten en que su elección debería reducirse a "cuestiones técnicas" y no a "sesgos ideológicos".

Por otro lado, pese a que Cadaval y Casas señalan al marco normativo español de "completo" en la regulación de los servicios públicos, echan de menos un escenario más armónico que establezca "criterios claros, reglamentos y condiciones para el desempeño de los servicios, una estructura tarifaria transparente y fórmulas de control que garanticen la correcta prestación". Además, expresan que la "exigente normativa" que marca el proceso de reinternalización "no está exenta de complejidad".

En los últimos años, Galicia ha experimentado tres reinternacionalizaciones de servicios locales. Arteixo pasó a gestionar directamente el servicio del agua, tras rescindir el contrato con Aqualia. "Los técnicos municipales pudieron demostrar que la empresa actuaba a través de subcontratas con sobreprecios de entre el 25%-245% e incumpliendo el compromiso de inversiones previsto", resalta el documento de Red Localis. El concello de Teo devolvió a la gestión pública el servicio del agua en 2015; mientras que el ayuntamiento de Santiago de Compostela recuperó el servicio de la ORA y la grúa municipal para su gestión directa a través de la empresa municipal Tussa en junio de 2018.

En la práctica los expertos observan "una larga tradición de participación de los operadores de naturaleza privada" en el ámbito público (34%), aunque conviven con empresas públicas (34%), entidades mixtas (22%) y prestaciones directas municipales (10%). Según Red Localis, la gestión del agua, junto con la recogida y el tratamiento de residuos, es el servicio que más se ofrece a partir de operadores privados. Asimismo, las localidades con menos de 5.000 habitantes revelan una presencia privada escasa (menos del 25% del total). Al contrario que en poblaciones medianas y grandes, donde tres cuartas partes de los suministros están en manos de empresas privadas o mixtas.