La tercera jornada de vaciado del combustible del quimiquero Blue Star (suma diez jornadas varado en la zona de As Mirandas en Ares) se inició con el primer susto del dispositivo. Una "pequeña rotura" de la manguera que une los camiones cisterna desde la costa con el depósito que guarda las veinte toneladas de carburante que restan por succionar, provocó un vertido que precisó de la intervención de lanchas motorizadas para su limpieza.

Tal y como informó la Delegación del Gobierno, se produjo una "pequeña rotura" en la manguera hacia las 11.00 de la mañana. A las 08.30 se habían retomado las tareas de bombeo del combustible sobrante, tras un fin de semana en el que se retiraron 90 de las 110 toneladas que portaba el buque. La fuga provocó el vertido de diez litros del carburante, una "pequeña mancha", indicaron desde la Delegación.

El incidente obligó a desplegar material absorbente y a movilizar a tres embarcaciones. Desde el principio se descartó la instalación de barreras anticontaminación en el entorno litoral de As Mirandas, por el reducido alcance de la carga vertida. De hecho el remolcador Don Inda permanece en las proximidades, desde que se inició hace tres días el vaciado de los tanques, con varias barreras anticontaminación por si fuera preciso su despliegue. Igualmente, el buque Vehintiocho, contratado por la empresa de rescate, tiene un cabo de unión permanente con ambos extremos del Blue Star para tratar de evitar que la fuerza de las olas lo pueda introducir más hacia tierra.

El suceso sobreviene en la recta final de los trabajos de extracción del carburante que almacenaba el barco con pabellón de Malta para su autoconsumo.

La Delegación del Gobierno en Galicia indicó que, tras la retirada de la mayor parte de la carga de fuel y gasóleo, se acomete en estos momentos la extracción de las últimas toneladas, apenas veinte, que permanecen en un estado más denso, lo que añade dificultad al bombeo de esta sustancia a los camiones cisterna en tierra.