Casi 500 días de búsqueda y más de dos millones de datos telefónicos analizados. Decenas de agentes especializados de la Guardia Civil se implicaron en la investigación de la desaparición de Diana Quer en agosto de 2016 valiéndose de la mejor tecnología al alcance del Estado. El olfato policial, las pesquisas en la calle, las geolocalizaciones telefónicas y las grabaciones de las cámaras acabaron llevándolos al principal sospechoso, José Enrique Abuín, alias El Chicle, abocado a la prisión permanente revisable por los delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato de los que acaba de ser considerado culpable, según el veredicto unánime del jurado popular. La resolución del caso valió a los investigadores del caso el reconocimiento por parte del Ministerio del Interior. Casi dos años después del arresto de El Chicle, no hay ni rastro de esas condecoraciones.

"Nunca hasta ese momento se había realizado en la Guardia Civil una operación en la que se barajase tal cantidad de información y de datos, alrededor de 9 millones de registros", recoge el informe de la Guardia Civil que destaca la calidad de la investigación. Por su "profesionalidad, perseverancia, minuciosidad, obstinación, dotes de investigación, constancia, tenacidad y compromiso sobresaliente", se propusieron hasta 70 condecoraciones „30 Cruces de Plata de la Orden del Mérito de la Guardia Civil (13 oficiales, 17 suboficiales, cabos y guardia, tanto de A Coruña como de Madrid) y 50 Cruces con distintivo Blanco de la Orden del Mérito de la Guardia Civil (seis oficiales, 34 suboficiales, cabos y guardias; y también un infante de Marina, dos policías locales, dos bomberos, tres forenses y dos trabajadores de la emprea de O Porriño ISV Consultores y Reconstrucciones de Accidentes, clave para descifrar que el coche del asesino de Diana Quer circuló la noche de crimen por la AG-11). Además, se reconocieron 99 felicitaciones con anotación en la hoja de servicios.

El propio padre de Diana Quer reclamaba el mes pasado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que "antes de que termine el juicio" se entreguen los distintivos que fueron "comprometidos" con la Guardia Civil. "Sería el deseo de mi hija", proclamó Juan Carlos Quer en el inicio del juicio por el asesinato de su hija.

Agentes de la Guardia Civil se preguntan por qué lleva tanto tiempo en el cajón de Interior la propuesta de reconocimientos. Estos distintivos ya no solo suponen un reconocimiento público por el servicio prestado, sino que además permiten importantes beneficios ya que se tienen en cuenta para exámenes de ascenso o destinos, así como para mejoras económicas.

Desde la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña para la XV Zona de Galicia eludieron pronunciarse sobre el retraso por parte del Ministerio del Interior sobre las condecoraciones a los agentes que participaron en la investigación del caso Diana Quer, aunque también quisieron aclarar que "el parte salió tarde de la Comandancia". "Tardó un año en ser enviado a Madrid tras la detención (de El Chicle el 29 de diciembre de 2017)", según detallaron ayer a este periódico.

Detrás del retraso de la firma por parte de Interior de estas condecoraciones está la inestabilidad del Gobierno central ante la repetición de las elecciones del 10-N. Sin embargo, durante este periodo el departamento dirigido por Grande-Marlaska aprobó otras distinciones a agentes de la Guardia Civil en Galicia por su trayectoria o por los servicios extraordinarios realizados. "No sabemos muy bien el porqué de esta demora, pero otros expedientes ya se han resuelto y firmado", coinciden en señalar varios agentes. "Es un pequeño reconocimiento a un servicio impagable", destacan al tiempo que manifiestan su incomprensión por el hecho de que todavía hoy, a punto de cumplirse dos años del arresto de El Chicle no se hayan concedido las condecoraciones a los agentes implicados en la investigación.