Más de tres años de subastas online. Desde octubre de 2015, cualquier ciudadano puede pujar por un piso, una finca, un garaje o trastero embargado por un juzgado a través de un simple clic desde el ordenador de su casa o de su trabajo. Ya no hace falta levantar la mano en el tribunal o notaría de turno.

Basta con entrar en el Portal de Subastas del Ministerio de Presidencia para conocer qué propiedades están en la lista de las próximas subastas en cada provincia. El proceso telemático permite multiplicar la publicidad de los procedimientos, facilitar información completa sobre la subasta como el bien en cuestión y, lo más importante para el postor, que le permite pujar en cualquier momento y desde cualquier lugar.

El único requisito que se exige para poder participar en una puja es hacer un depósito en torno al 5% de precio de la propiedad sacada a subasta. Una vez que el licitador resulta adjudicatario de un determinado bien, este quedará obligado a firmar el acta y pagar el resto del precio de la adjudicación en los 40 siguientes días. Pero si no se paga en ese plazo, se perderá el depósito y quedará automáticamente anulada la adjudicación, dando opción al siguiente mejor postor. En el caso de no lograr la subasta, la Administración devolverá al día siguiente el depósito realizado.