Una vecina de Pontevedra de 48 años de edad falleció ayer como consecuencia de un grave accidente de tráfico que se produjo en el kilómetro 100 de la Nacional 550, en la conocida como variante de Caldas, cerca de la salida hacia Cuntis. El siniestro tuvo lugar sobre las 07.30 horas.

El coche que conducía esta mujer, y que viajaba sola, impactó frontalmente contra otro en el que viajaban tres hombres. Su conductor, resultó herido grave, aunque fuentes hospitalarias señalaron que no se teme por su vida. El estado de los otros dos era leve, indicaron fuentes de la Guardia Civil. Los tres fueron trasladados en sendas ambulancias del 061 al hospital de Montecelo en donde estaban siendo atendidos en el servicio de Urgencias. Fueron identificados como F. J. R. , de 43 años; A. M. M. T. de 48 años; y M. R. F. de 47 años.

Aunque las causas del accidente todavía están bajo investigación, la Guardia Civil apuntó como posible desencadenante del siniestro a la "somnolencia" de la conductora fallecida, dado que el vehículo en el que viajaba sola se salió de su carril e invadió e contrario por el que circulaba el vehículo en el que iban los tres varones que resultaron heridos. El impacto fue brutal y de hecho al lugar del siniestro se trasladaron efectivos de los bomberos de O Salnés con base en Vilagarcía para excarcelar el cuerpo de la víctima.

La carretera quedó cortada mientras se realizaban las tareas de rescate, asistencia a los heridos y limpieza. Se generaron retenciones y la Guardia Civil habilitó desvíos alternativos para regular el tráfico. Sobre las diez de la mañana, la situación estaba ya normalizada. En el lugar del siniestro, fuentes de la Guardia Civil aludieron a la importancia de que los conductores tengan en buenas condiciones los vehículos, pero también que se aseguren de no ponerse al volante si sus condiciones físicas no son las mejores por el cansancio o cualquier otra razón.