Las fuerzas de seguridad abortaron ayer el intento de fuga de uno de los tres polizones guineanos que permanecen a bordo del petrolero Harald Maersk, con bandera danesa, que se vio obligado el sábado a atracar en Vigo tras descubrir su presencia a bordo. Según detallaron a Europa Press fuentes policiales, los hechos tuvieron lugar sobre las 13.45 horas, cuando se descubrió que este hombre había abandonado la embarcación, donde había permanecido custodiado por personal de la misma.

Según la fuentes policiales, el polizón fue detectado cuando estaba ya en tierra, en las inmediaciones de unos de los pantalanes de A Laxe.

El intento de fuga fue abortado por efectivos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Portuaria, que desconocen aún cómo se produjo la huida. El polizón fue devuelto al interior del barco, atracado en el puerto de Trasatlánticos, a la espera de que se resuelva la situación de los polizones, cuyo expediente se encuentra actualmente en Madrid.

Dado que el buque es territorio del país que lo abandera, los polizones han de permanecer en él sin bajar a tierra, ya que la legislación internacional estipula que son las navieras las responsables de devolverlos al puerto de origen, en este caso Las Palmas de Gran Canaria, de donde partió el buque el pasado 22 de enero con destino a norte de Europa.