Ciudadanos presiona a la dirección del PP, liderada por Pablo Casado, para que imponga un acuerdo electoral en Galicia, Euskadi y Cataluña, al que se niega el presidente de la Xunta y candidato a la reelección por parte de los populares, Alberto Núñez Feijóo. "Génova es quien tiene el papel no de convencer, sino de marcar quién manda realmente en el PP. Entendemos que Casado tiene que saber qué rumbo tiene que darle al partido y si está dispuesto a perder una comunidad autónoma como la de Galicia", expuso ayer la portavoz del partido naranja en Galicia y exdiputada, Beatriz Pino.

Inés Arrimadas, portavoz de Cs en el Congreso, incluso propuso que en la comunidad gallega presentasen una papeleta con las siglas PP-Cs.

Feijóo rechazó de nuevo esa coalición, pero ofreció el PP a los votantes de Ciudadanos. "Todos los votantes de Ciudadanos, si quieren moderación y estabilidad, si quieren un Gobierno que no sea nacionalista, ni populista, ni socialista, tienen en las papeletas y en la casa común del PP las puertas abiertas", apuntó.