La burbuja que rodea los alquileres de vivienda en Galicia con incrementos continuos de precios en los últimos años -7% en 2019- ha provocado que el rendimiento de los que ponen en el mercado un inmueble para alquilar haya alcanzado el 5,1%, según el estudio La rentabilidad en España en 2019, elaborado por Fotocasa. Es el porcentaje más alto desde 2006, año del que data el primer estudio.

No existe en la actualidad ningún producto financiero -que no tenga un elevado riesgo- que ofrezca una rentabilidad similar. Ninguno se acerca. Por ejemplo, el interés de la última subasta de letras del Tesoro Público fue negativo (-0,469%) y las últimas obligaciones a 10 años ofrecían un cupón del 0,50%. Y según los últimos datos del Banco de España, en noviembre pasado el tipo de interés medio de los depósitos a plazo de los bancos fue del 0,05%. Es decir, por cada 1.000 euros invertidos a un año, las ganancias se reducían a medio euro. Hace una década eran 22 euros.

Aunque siempre lo han sido, pero ahora más, los alquileres de vivienda se han convertido en un refugio para los inversores que en lugar de colocar su dinero en productos bancarios prefieren comprar casas y alquilarlas. Saben que, como mínimo, a finales de año el beneficio será de un 5%. Este rendimiento lo conseguirán en el caso de que los inmuebles estén situados en territorio gallego, porque en el resto de España la cifra es mayor.

Galicia es la comunidad con la rentabilidad más baja por alquilar una vivienda. Y eso que se ha incrementado en los últimos años: creció medio punto en 2019, del 4,6% al 5,1%. Una década antes, solo era del 3,5%. A nivel nacional, el rendimiento de la vivienda se situó el año pasado en un 6,6%, cuatro décimas más que en diciembre de 2018. La comunidad con mayor rédito en 2019 fue Cataluña con un 7%. Le siguieron Comunitat Valenciana con un 6,8% y Canarias con un 6,6%.

Los expertos explican este incremento tanto a nivel gallego como nacional por la evolución del precio de la vivienda de segunda mano, que a cierre de 2019 registró una caída del 1,3%, el primer descenso en tres años. Sin embargo, el precio de los pisos en alquiler sigue al alza, aunque no con la fuerza con la que lo hacía en 2018. El año pasado se cerró con una subida del 7%. Pese a los incrementos de los últimos años, los alquileres en la comunidad gallega aún siguen lejos de su máximo histórico que se registró en mayo de 2007, antes de que explotase la burbuja inmobiliaria. Entonces, el precio del metro cuadrado era de 8,7 euros por los 6,6 actuales. En febrero de 2016 estaba en los 5,3.

Si se hace un zoom sobre los datos, tres de las 48 provincias analizadas en el informe tienen una rentabilidad superior al 7%; 18 de ellas (el 38%), mayor del 6% y 27 (el 56%), inferior al 6%. La provincia con mayor rendimiento es Valencia con un 7,5%, seguida de Toledo con un 7,4% y Sevilla con un 7,1%.

La menos rentable de todas las españolas es Ourense, con un 4,5%. Las otras tres provincias gallegas también están entre las 15 que ofrecen menos ganancias. Lugo es la 35ª con un 5,4%; A Coruña, la 40ª con un 5,3% y Pontevedra, la 45ª con un 4,9%.

En cuanto a los municipios gallegos más rentables para alquilar, el primero es Ferrol (5,8%), seguido de Lugo (5%), Ourense (4,8%) y Pontevedra (4,6%). La ciudad de A Coruña está en la 90ª posición de las 94 analizadas. Solo ofrece un beneficio del 4%.