La criminalidad ha descendido en las cuatro provincias gallegas entre los meses de enero y marzo, con una mayor bajada en las provincias de Pontevedra y A Coruña y con un descenso del 64,9% entre el 14 y el 31 de marzo durante el estado de alarma decretado por el Gobierno.

Así lo informa la Delegación del Gobierno en Galicia que subraya el aumento de la eficacia policial, que ha supuesto que en el primer trimestre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad hayan esclarecido en Galicia "el 43,6% de las infracciones penales conocidas, un 2,1% más que en el mismo periodo del año anterior".

Sobre este dato, el delegado del Gobierno, Javier Losada, expresa la felicitación pública a los efectivos policiales por estas cifras, "que inciden directamente en la calidad de vida de la ciudadanía gallega".

Del balance de criminalidad del primer trimestre se desprende que Galicia continúa como cuarta más segura del Estado, con 29,1 infracciones penales por cada mil habitantes en el acumulado de los últimos doce meses, "muy por debajo de la media estatal, situada en 45,8", según los datos publicados este jueves por el gabinete de coordinación y estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior.

Sobre este informe, la Delegación del Gobierno remarca que la tasa de criminalidad de Galicia en los últimos doce meses "desciende cinco décimas, en paralelo a la disminución de las infracciones penales registradas".

"Así, entre enero y marzo de este año se conocieron en Galicia 17.728 infracciones penales, un 7,6% menos que en el mismo periodo del año pasado (1.448 menos)", explica sobre los citados datos.

Descenso en las cuatro provincias

El descenso de la actividad delictiva se repite en las cuatro provincias gallegas. Por relevancia, la mayor disminución se da en las provincias atlánticas de Pontevedra y A Coruña. Pontevedra acumula un descenso de ocho décimas en la tasa de criminalidad que baja hasta 29,8 delitos por cada 1.000 habitantes.

A Coruña acumula una bajada cinco décimas alcanzado una tasa de 31,2 delitos por cada 1.000 habitantes. En cuanto a Lugo desciende dos décimas hasta 22,5 y Ourense registra tres décimas menos hasta 26,3 delitos por cada 1.000 habitantes.

Estado de alarma

Por otra parte, apunta que en Galicia se repite el patrón del resto del Estado por el que la declaración del estado de alarma implicó un cambio sustancial en la evolución de la criminalidad.

Así, ha detallado que desde el pasado 14 de marzo, fecha de la entrada en vigor del estado de alarma, y hasta el 31 de ese mes, los cuerpos policiales registraron en Galicia 1.220 infracciones penales. Esta cifra supone una reducción de un 64,9 por ciento respecto al mismo periodo de 2019, en el que los posibles delitos registrados fueron 3.478.

Tipoligías penales

En cuanto a las tipologías de los delitos, se han producido importantes descensos en los hurtos (un 16,7% de bajada); lesiones y riñas (un 14,7% menos). Le siguen una tipología que preocupaba especialmente en trimestres anteriores y que por primera vez descienden los delitos vinculados a la libertad e indemnidad sexual, que descienden globalmente un 8,8%.

También bajan los robos con violencia e intimidación un 7,6%. Por el contrario, aumentan un 3,9% los robos con fuerza en las viviendas y establecimientos comerciales.