Eva Barreiro, la coruñesa de Carnoedo (Sada) que entró pisando fuerte en Operación Triunfo 2020 y que se coronó como tercera finalista del talent show de La 1, se despidió la semana pasada de la Academia que la vio crecer como artista. Ante ella se abre ahora una nueva etapa como joven promesa del panorama musical y, tras su paso por el programa, Eva tiene muy claro que su prioridad ahora es "devolver todo el amor" que ha recibido a través de lo que mejor sabe hacer: cantar.

¿Cómo han sido sus primeros días fuera de la Academia?

Han sido impactantes, pero no tanto como cuando salimos durante el confinamiento. Esta vez estaba mucho más preparada, porque sabía todo lo que me podía encontrar, y la verdad es que ha sido muy guay. Además, es como si todavía no hubiese salido del todo de la burbuja, porque por ahora sigo conviviendo con algunos de mis compañeros de la Academia en Barcelona.

¿Hay algo que le haya quedado por hacer dentro del concurso?

Evidentemente, me he quedado con ganas de hacer muchas cosas en Operación Triunfo, pero espero poder tener un futuro enfocado a la música que me permita poder devolver todo el amor que estoy recibiendo a través de mis canciones.

El público la nombró favorita en la primera gala, y los profesores y el jurado siempre han valorado su talento. ¿Por qué le sorprendió tanto quedar tercera en la final?

Porque mirando a mi alrededor había una gran cantidad de talentos entre mis compañeros, y no me imaginaba que pudiese quedar en un puesto por encima de ellos. Es una comparación sana, porque realmente los admiro mucho.

¿Cambiaría algo de su paso por Operación Triunfo

Me gustaría cambiar cosas en relación a mi presencia escénica durante la primera parte del concurso, porque me comían los nervios y la inseguridad en el escenario, y eso es algo que nunca me había pasado. No era capaz de verme bien ahí encima, y eso se reflejó en mis actuaciones. Sin embargo, creo que todo proceso requiere una evolución, y el poder sentirme cómoda al regresar del confinamiento es prueba de ello. Fue un camino con muchos baches, pero la vida es así, y para llegar a una meta hay que pasar por todos ellos.

¿Qué piensa cuando le dicen que ha formado parte de la edición de Operación Triunfo

Que me siento muy orgullosa de pertenecer a esta edición. La vida de un artista nunca se rige por los cánones típicos de la vida de un ciudadano normal, y la mía nunca lo ha sido. Me siento muy orgullosa de pertenecer a esta edición gafada, porque pese a todo vivimos cosas muy chulas, y me siento feliz por haber compartido esta experiencia con mis compañeros.

¿Ha cambiado su forma de recibir las críticas de los haters en esta segunda vuelta a la realidadhaters ?

Sí. Al salir esta segunda vez vi que las críticas seguían siendo las mismas, pero yo había cambiado mi forma de verlas. Mi persona ha cambiado mucho durante el programa, y ya no me interesa aquello que no es constructivo. Creo que siempre está bien recibir el feedback de la gente a la que no le gustas porque eso te hace aprender y evolucionar como artista, pero en las redes hay una cantidad enorme de comentarios vacíos y sin sentido.

De todo lo aprendido en la Academia, ¿con qué se quedaría?

Todas las palabras de los profesores, los artistas invitados a la Academia y el jurado me han marcado bastante, así que no podría elegir. Quizás destacaría la visita de Guille Milkyway, de La Casa Azul, que vino a darnos una charla sobre composición que me gustó mucho y me sirvió bastante, porque yo no tenía experiencia en ese sentido.

En la Academia llegó a cantar un tema propio sobre las orcas en cautividad. ¿Fue una de las dos canciones que compuso en su casa durante el confinamiento?

No, la canción sobre las orcas en cautividad la escribí después, en la Academia, a raíz de un día que estaba un poco triste. Durante el confinamiento viví ese proceso interior de madurar las cosas y de pararme a pensar, y ahí fue cuando encontré la inspiración y vi que esta también puede venir para crear canciones en castellano. En ese momento descubrí que podía componer cosas muy diferentes a Dumb, y me sentí muy orgullosa. Espero poder sacar esas canciones algún día.

¿Cuál fue el momento más duro dentro del concurso?

Probablemente fue el período de esas dos semanas en las que se fueron Anne y Rafa, porque para mí eran dos pilares muy importantes en la Academia. Antes de irnos por el confinamiento pasé por una etapa de inestabilidad emocional muy fuerte, y para mí fue muy duro estar ahí dentro sin ellos dos. Necesitaba volver a casa para relajarme y racionalizar las cosas, así que, en ese sentido, el confinamiento me sentó muy bien, porque pude volver con más energía.

¿En qué momento de su vida empezó a tener clara su vocación por las artes?

Desde muy pequeña yo quería ser actriz. Recuerdo que mi padre tenía una vitrina en el salón repleta de películas clásicas. Algunas eran de miedo o no eran aptas para niños, y mi padre me decía que algún día las podría ver con él, cuando fuese mayor. Yo me quedaba mirándolas, y recuerdo pensar que yo quería hacer esas películas para salir en esa vitrina. Desde entonces, siempre tuve claro que quería dedicarme a las artes, y recibí el apoyo de mi familia.

Siempre menciona que su padre tuvo un papel fundamental en su pasión por la música.

Sí. Mi padre fue DJ en varios locales de Riazor cuando era joven. Es muy guay, porque además él fue quien me transmitió todo el amor que sentía por la música. A día de hoy podría decir que somos casi la misma persona en cuanto a la pasión que compartimos tanto por la música como por el cine.

¿Cómo vivieron sus familiares su paso por el concurso?

No tuve mucha oportunidad de saber cómo lo han vivido ellos, porque tanto en el confinamiento como ahora he estado lejos. Lo que sí que me han dejado claro es que están muy orgullosos de mí.

Próximamente comenzará a trabajar con Warner Music. ¿Qué espera de esta nueva etapa?

Estoy muy expectante, y me apetece muchísimo vivirlo todo ya, cuanto antes. Tengo muchas ganas de irme a vivir a Madrid, y de trabajar mucho. Ver que todo a lo que siempre quise dedicarme se hace realidad es algo totalmente nuevo, diferente y muy heavy para mí.

¿Compaginará su carrera como intérprete con la música?

Es cierto que ya no voy a volver a la Escuela de Arte Dramático, pero no quiero dejar de lado la interpretación, por eso voy a seguir probando suerte en los castings. Quiero que esto siga formando parte de mí.

¿Qué sintió al conocer el éxito que había tenido su primer single, Dumb,

Me impactó mucho , y no puedo estar más contenta. Tenía miedo por sacar un single en inglés en España, pero la verdad es que ha sido maravilloso y todos los que han disfrutado de la canción me han apoyado mucho. Es todo un orgullo, y me gustaría seguir colaborando con Garabatto, porque nos hemos llevado genial.