El PSdeG quiere completar el trío de ases de poder, uniendo su presencia en el Gobierno central y la mayoría de ciudades y diputaciones de Galicia al timón en San Caetano, consiguiendo la Xunta tras las elecciones autonómicas del 12 de julio. El candidato socialista, Gonzalo Caballero, se rodeó ayer de los principales espadas de su formación y esgrimió músculo municipal para aclarar su mensaje. "La Galicia del futuro hay que hacerla en consonancia y en sintonía con el poder municipal", sentenció.

Caballero estuvo ayer arropado en Ourense por los alcaldes de A Coruña (Inés Rey), Ferrol (Ángel Mato), Santiago (Xosé Sánchez Bugallo), Vigo (Abel Caballero), y Lugo (Lara Méndez), y los presidentes de las diputaciones de A Coruña (Valentín González Formoso, Pontevedra (Carmela Silva), Lugo (Xosé Tomé).

"El poder municipal en Galicia es socialista. Gobernamos en cinco de las siete grandes ciudades, en tres de las cuatro diputaciones. Y los gobiernos socialistas representan progreso, estabilidad, bienestar y oportunidades para la ciudadanía", expuso Caballero.

El líder socialista reivindicó el poder local de su partido, gran parte recuperado tras las elecciones municipales del año pasado, y definió a regidores y presidentes de diputación como "los mejores alcaldes y presidentes de la comunidad".