Diez kilómetros en sentido contrario por la autopista de A Costa da Morte, la AG-55, entre Carballo y Coristanco. Con tensión y angustia vivieron los vehículos que se cruzaron por la carretera de pago con el conductor que se dirigía a Malpica. Al grito de "Párate, párate" y con continuos avisos del claxon, otro automovilista que circulaba en sentido correcto y su acompañante intentaban poner fin al trayecto que pudo haber ocasionado un accidente con fatal desenlace. Tras varios kilómetros recorridos en paralelo, lograron detener al conductor junto a la mediana de la autopista.

La Guardia Civil investiga lo ocurrido para tratar de esclarecer el motivo por el que el conductor, de avanzada edad y vecino de Santiago, irrumpió en la autopista en sentido contrario. Los hechos ocurrieron el pasado lunes, cerca de las diez de la noche entre el kilómetro 33 y el 43 de la AG-55, entre Carballo y Coristanco, cuando el hombre pretendía llegar a su segunda residencia en Malpica, según informó el Instituto Armado.

En un vídeo grabado desde otros vehículo que circulaba en sentido correcto, se observa al conductor gritando al hombre para que detuviese el coche. "¡Pare, oiga! ¡Arrímate aquí, que vas en sentido contrario, coño, que te arrimes aquí, joder!", le grita a través de la ventanilla.

"¡Párate, párate, arrima el coche aquí, que vas en sentido contrario!", le insiste. Una vez consigue que se percate de la situación de peligro creada, el conductor llega a bajarse de su vehículo y se acerca a la mediana, hasta que logra que el investigado detenga el coche.

Mientras esto ocurre, se escucha a la mujer que viajaba con él alertando por teléfono a las autoridades, explicando que el conductor en sentido contrario es "un señor muy mayor".

Al conductor que viajaba en sentido contrario se le investiga por un delito contra la seguridad vial, por conducir "con temeridad manifiesta", poniendo "en peligro la vida o la integridad de las personas", según detalla la Guardia Civil. Varias llamadas de usuarios habían alertado a la central de emergencias del Instituto Armado de la presencia de este conductor circulando en sentido contrario.

La mayoría de los casos de conductores interceptados en sentido contrario son personas de avanzada edad que irrumpen por despiste. Desde que en 2015 se reforzó la vigilancia sobre este colectivo en Galicia y se puesto en marcha el Plan Mayores para evitar que conductores con sus capacidades psicofísicas mermadas sigan al volante poniendo en riesgo su seguridad y la de los demás usuarios se ha reducido el número de usuarios que irrumpen en una carretera en sentido contrario. A esos conductores, Tráfico les manda a un chequeo del Sergas para confirmar si son aptos para seguir al volante o de hacerlo deben conducir con determinadas restricciones (no circular de noche, viajar siempre con un acompañante, no sobrepasar determinada velocidad o desplazarse a una determinada distancia del domicilio, entre otros).

A lo largo del año pasado Tráfico requirió para un control médico extraordinario a 421 conductores, un 13% menos que los 491 iniciados el ejercicio anterior.