De ser la segunda fuerza con más votos y dar el sorpasso al PSdeG, la marca heredera de En Marea en la cita electoral del 12-J se se quedó fuera del Parlamento al no conseguir ni un escaño. La debacle de Galicia en Común, capitaneada por el diputado coruñés Antón Gómez Reino, llevó a los distintas familias políticas que integran la coalición a analizar los resultados y el futuro de cada formación por separado. Desde Anova, su portavoz nacional, Antón Sánchez, arremetió ayer contra quienes consideran las elecciones autonómicas como el triunfo de la "moderación", tras quedar fuera de la Cámara Galicia en Común en la que esta formación participaba junto a Podemos, Esquerda Unida, Marea Atlántica y Compostela Aberta. Durante la celebración del Día da Patria en el Campo da Rata, en A Coruña, Sánchez apeló a no resignarse porque "siguen sobrando los motivos para organizarse y luchar".

Animó a los suyos a seguir la batalla política para evitar que la crisis causada por el coronavirus sea pagada por la mayoría social. "Estamos en un momento, después de unas elecciones, en el que tendremos que hacer autocrítica y reflexión, pero también en el que nos dicen que es el triunfo de la moderación y de la vuelta a la normalidad", criticó el dirigente nacionalista. Asimismo, cargó contra los que halagan que "esa vuelta a la normalidad" puede "beneficiar posibles acuerdos", ya que desde Anova no colaborarán a "dar carta de normalidad a lo que se está haciendo desde los Gobiernos" y, concretamente, a las actuaciones de Alberto Núñez Feijóo desde la Xunta de Galicia.

En el encuentro, la formación hizo una ofrenda floral en honor a las víctimas del fascismo, pues ese lugar fue campo de fusilamiento de la dictadura franquista y los golpistas de 1936. A la cita acudieron el fundador del partido, Xosé Manuel Beiras, y el exalcalde de Santiago Martiño Noriega .