El PSOE negocia contra reloj apoyos para que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) acepte la última propuesta del Ministerio de Hacienda para poder gastar durante dos años 5.000 millones de euros de sus ahorros. La fórmula supone una inyección de liquidez para las arcas estatales, pues consiste en que las entidades locales cedan a Hacienda todos sus remanentes (14.000 millones) y esta se los devuelva poco a poco. Ante el rechazo inicial, Hacienda abrió la puerta a ceder más competencias a las entidades locales, aunque no las ha concretado.
La Junta de Gobierno de la FEMP se reúne hoy para votar la propuesta final del Gobierno central y el resultado es incierto, pues al PSOE le hace falta un voto para garantizar su aprobación: tiene 12 de los 25 miembros. La Junta de Gobierno de la FEMP está compuesta por 25 miembros: 12 del PSOE, 10 del PP, uno de IU-Podemos, uno de Cs y uno del PdeCat. De momento, el resto se ha negado, aunque las esperanzas socialistas están depositas en los alcaldes vinculados a su socio, Unidas Podemos.
El presidente de los alcaldes y regidor de Vigo, Abel Caballero, defendió ayer una oferta que supone "la mayor concesión en la historia de la democracia" a las entidades locales y que permitirá cumplir su demanda para disponer de sus ahorros, que "no se pueden usar porque hay una ley orgánica desde 2012 que lo prohíbe". Recordó así la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, que limita el gasto de ese dinero, paso siempre condicionado al saneamiento contable.
Para esquivar esas restricciones, Hacienda propone que las entidades locales le cedan 14.000 millones de sus remanentes y devolverles poco a poco ese dinero: 3.000 millones este año, 2.000 en 2021 y el resto en entregas anuales durante una década. Además de nuevas competencias, Hacienda permitiría al poder local gastar esos 5.000 millones iniciales en agenda urbana y movilidad sostenible, cuidados para mayores y dependientes, ayuda a domicilio y teleasistencia y cultura.
Para el portavoz del PP en la FEMP y alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, la propuesta es "inaceptable", ya que se resume en que los ayuntamientos pierden en 2020 y 2021 el 65% de sus ahorros, que, sin embargo, gana el Estado en liquidez.
También desde Cs, el alcalde de Granada, Luis Salvador, se mantiene en el no por considerar que el Gobierno está "enfrentado al municipalismo, chantajeando a los que tienen remanentes a que les den un parte importante a costa de devolver un poquito para que puedan tener financiación".
