Con diligencias de investigación abiertas por la Fiscalía de Ourense para determinar si se cometió un delito contra el medio ambiente, con una propuesta de sanción de la Xunta de 35.000 euros y un expediente en trámite por parte de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, Adif proseguía ayer con los trabajos para la retirada de los vagones arrojados ladera abajo en Sobradelo durante las maniobras de liberación de la vía de un convoy descarrilado el 28 de julio. "Continúan las labores de retirada del último vagón en la ribera del Sil. Dichas labores avanzan conforme al plan previsto y con las debidas medidas de protección medioambiental", afirmaba ayer Adif en un tuit.

Durante las operaciones se han adoptado todas las medidas de protección medioambientales. Asimismo, se está verificando el estado del material que cayó a la ribera del Sil.