El Ejército se incorporó ayer al dispositivo de vigilancia del monte con el despliegue de las patrullas de la Brigada Galicia VII (Brilat) y del Tercio Norte de Infantería de Marina, que forman parte de la operación Centinela Gallego 2020. En total serán hasta 460 los soldados que participen en el operativo, centrados sobre todo 33 ayuntamientos del sur de las provincias de Pontevedra y Ourense, que estará desplegado hasta el 30 de septiembre.

Dentro de los tres niveles de riesgo establecidos, el esfuerzo calificado de nivel medio estará compuesto por un total de 27 patrullas formadas por militares pertenecientes a distintas unidades. A la Brilat, que despliega 22 patrullas, se suman cinco patrullas pertenecientes al Tercio Norte de Infantería de Marina, con sede en Ferrol, que prestarán atención a la zona sur de la provincia de A Coruña.

La aportación del Ejército en este nivel medio se refuerza con un sistema aéreo pilotado remoto (denominado Raven), que realizará labores de vigilancia y de disuasión a posibles incendiarios, ya que las cámaras del dispositivo pueden registrar tanto de día como de noche la imagen y la actividad de cualquier persona o vehículo en el monte. Los registros de estas cámaras servirán como pruebas para denunciar a los incendiarios.

El dron dispone de una capacidad de vuelo de entre 45 y 90 minutos -dependiendo de las condiciones del aire- y un alcance de 10 kilómetros y podrá observar en tiempo real cualquier actividad que se realice en el monte, para transmitirlo al momento a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en caso de tratarse de una presunta actividad delictiva. También puede grabar, incluso de noche, a vehículos y personas sospechosos.

El despliegue se elevará hasta las 50 patrullas y un helicóptero de vigilancia en los momentos de riesgo alto, y hasta 75 patrullas y 2 helicópteros de vigilancia en las situaciones de riesgo muy alto.

La Base Militar General Morillo acogió el acto de presentación, con la presencia del conselleiro de Medio Rural en funciones, José González, quien advirtió de que los representantes y autoridades públicas se mantendrán "implacables" con los incendiarios.

"Vamos a seguir siendo contundentes en la lucha contra los delincuentes que ponen en riesgo nuestros montes y, sobre todo, a las personas", destacó, para insistir en que la vigilancia y la disuasión constituyen una "prioridad" de cara a reducir la actividad incendiaria.

El responsable autonómico recordó que la mitad de los fuegos registrados en Galicia en el último mes se produjeron de noche y muchos de ellos con varios focos simultáneos, lo que prueba su intencionalidad.