La Guardia Civil ha investigado en lo que va de año a 46 personas como presuntas incendiarias y ha detenido a otras dos por su relación con los incendios forestales detectados en la comunidad. Las actuaciones se enmarcan en el operativo de vigilancia medioambiental que el cuerpo armado intensifica y que está integrado en la actualidad con 154 efectivos dentro del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona).

Ayer mismo, la subdelegada del Gobierno en A Coruña, Pilar López-Rioboo, se subió al vuelo de vigilancia medioambiental para conocer, motu proprio, el funcionamiento del dispositivo para la lucha contraincendios en Galicia. En lo que va de año han sido investigadas 46 personas y se han realizado dos detenciones por la presunta autoría de incendios forestales, concretaron fuentes de la Benemérita.

"Cualquier incendio provocado supone un acto criminal penado por la ley, pero también cabe recordar que cualquier imprudencia grave supone el mismo tipo de delito", indicaron fuentes de la Guardia Civil. En ocasiones los fuegos "son derivados de actos de vandalismo, rencillas personales, regeneración de pastos, imprudencias por no tomar medidas o accidentes", especifican, por lo que "hablar de un único perfil de incendiario es sumamente complicado".

Para la investigación de los incendios, la Guardia Civil dispone en la comunidad de 17 equipos que forman un total de 68 efectivos que pueden ser apoyados por miembros de la Policía Judicial y del Servicio de Información.

Este cuerpo armado destaca su "esfuerzo" para la vigilancia contra incendios. En la provincia coruñesa se refuerza el servicio con doce efectivos del Escuadrón de Caballería, 18 miembros del A.R.S (Agrupación Reserva y Seguridad), tres efectivos y un helicóptero del Servicio Aéreo, 9 miembros de la Policía Judicial y otros 13 integrantes del GIMA 4 UCOMA (Grupo de investigación medioambiental de la Unidad Central).

Los equipos se coordinan para intensificar la labor en la provincia junto con los agentes ambientales y demás personal del servicio contra incendios forestales de la Xunta.

La administración autonómica cuenta asimismo con tecnología de apoyo para sus investigaciones. De hecho existen drones y cámaras. Y es que la vigilancia y la disuasión son prioridad de la Xunta en la presente campaña de cara a reducir la actividad incendiaria intencionada.

Los últimos datos sobre la nocturnidad y la existencia de varios focos simultáneos en la mitad de los fuegos registrados en Galicia este verano "muestra claros indicios de intencionalidad", especifican fuentes de Medio Ambiente, que remarcan el hecho de que los incendios se declaren en condiciones de temperaturas elevadas o viento fuerte.

Incidente en Sada

Durante el transcurso del vuelo de ayer se detectó una incidencia relativa a la gestión de residuos en la demarcación del concello de Sada, que será investigada por la patrulla del Seprona para comprobar la existencia de posibles infracciones. La localización de este punto débil es solamente uno de los ejemplos de la efectividad del despliegue de medidas, que se han intensificado esta temporada estival, la de mayor riesgo para el monte.