Hace cuatro años, tras ganar las elecciones autonómicas de 2016, Alberto Núñez Feijóo no movió ni uno solo de los asientos de su gobierno. Tocaba encarar la consolidación económica y optó por mantener en el cargo a todos sus conselleiros -cierto es que el año anterior había acometido dos remodelaciones seguidas en su equipo-. Y ahora debe encarar un reto más complicado todavía: gestionar la crisis sanitaria y económica del Covid-19. El presidente de la Xunta en funciones mantiene la incógnita sobre su nuevo gabinete, pero ayer aseguró que en su actual ejecutivo hay "gente muy capaz" y que tiene el "aval" de las urnas -todos los conselleiros fueron en las listas del PP y son hoy diputados-. Pero, a pesar de ello, evitó cerrar ninguna puerta de cara a la formación de su nuevo gobierno, que, según dijo, está llamado a "trabajar" y a "sufrir" en un contexto marcado por la pandemia. Así lo trasladó ayer durante la jornada en la que quedó constituida la Diputación permanente y las comisiones de la XI Legislatura. No hubo pistas reveladoras en relación al nuevo Ejecutivo autonómico, puesto que, como es habitual, Feijóo evitó incluir a alguno de sus conselleiros actuales en las órganos de gobierno de las comisiones.

Preguntado sobre si optará por un Gobierno continuista para arrancar su cuarto mandato, optó por la ambigüedad, sin aportar pistas. Antes de designar a su equipo, según recordó, habrá que cumplimentar varios trámites: tendrá que ser investido y tomar posesión de su cargo el 5 de septiembre.

"En el Gobierno hay gente muy capaz y experimentada", declaró, antes de añadir que "también" en el grupo popular hay diputados que reúnen ambas condiciones, al igual que "en el conjunto de la sociedad hay gente que puede formar parte" de su futuro Ejecutivo.

"Lo más importante es que este Gobierno en funciones no deje de gobernar y que el que tome posesión a partir del 7 de septiembre sepa que inicia el periodo más difícil que nunca tocó a un Gobierno de la comunidad, un periodo de pandemia con el impacto económico y social que supone", resaltó. La jornada de constitución de las comisiones en el Parlamento dejó 13 de los 14 órganos presididos por el PP, con mayoría absoluta en la Cámara, mientras que la diputada del BNG presidirá la Comisión 3ª de Economía, Facenda e Orzamentos, la única dirigida por la oposición.

Esta Diputación Permanente contará con un total de 23 miembros repartidos de forma proporcional -13 del PP, seis del BNG y cuatro del PSdeG-, mientras que las demás comisiones contarán con 12 integrantes: siete para el PP, tres para el BNG y dos para el PSdeG.

La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, aprovechó ayer para volver a proponer un "gran acuerdo" por la reconstrucción económica y social de Galicia en el que, además de las fuerzas parlamentarias, participen las universidades, los sectores económicos y los sindicatos.

El portavoz parlamentario del PSdeG, Pablo Arangüena, avanzó que su formación reclamará en la legislatura que arranca que la Xunta deje de "echar balones fuera" y ejerza sus competencias para hacer frente a los efectos "económicos y sociales" de la pandemia.