Los huesos hallados en el paraje ourensano de Os Muíños (concello de Barbadás) pertenecen al cuerpo de la joven de 27 años Nerea Añel Vázquez, desaparecida desde el pasado mes de enero. Una portavoz de la Guardia Civil confirmó ayer la hipótesis que se barajaba desde que el domingo unos senderistas localizaran unos restos mortales en el citado paraje, uno de los lugares que habían sido rastreados por la Policía Nacional cuando se denunció la desaparición de la joven.

Dado el avanzado estado de descomposición del cadáver y la ausencia de elementos a su alrededor que ayudasen a la identificación, esta incógnita solo podría despejarse a través del estudio de los huesos. El estudio se realizó en el laboratorio de Criminalística de la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid, y los resultados que los atribuyen al cadáver de Nerea llegaron a la comandancia de Ourense ayer al mediodía.

Pese a esta confirmación, la portavoz de la Guardia Civil no ofrece ningún detalle sobre la posible causa de la muerte dado que las diligencias sobre esta desaparición fueron abiertas por la Policía Nacional y serán los agentes de este cuerpo quienes se encarguen de esclarecer si se trata de una muerte violenta.