Los alcaldes siguen dando la batalla contra Hacienda. Tras conseguir derogar el decreto sobre el uso de los remanentes, que fue pactado con la cúpula de la FEMP, los regidores vuelven a aliarse para que el Gobierno modifique su última propuesta y atienda las reivindicaciones del municipalismo: poder invertir sus ahorros -en el caso de Galicia rozan los 1.300 millones- y recuperar el fondo de 5.000 millones que recogía la reforma tumbada hace dos semanas en el Congreso tras el rechazo en bloque de la oposición. Ahora todas las fuerzas políticas representadas en el órgano de poder local, el PSOE incluido, dan por hecho que nuevo decreto de Hacienda, que recoge la suspensión de la regla de gasto este año y que permitirá liberar 3.000 millones del superávit municipal de 2018 y 2019, estará abocado de nuevo al fracaso si los ayuntamientos no logran fondos extraordinarios para poder afrontar la crisis del Covid-19.

La rebelión del municipalismo se recrudeció al sumarse Unidas Podemos al rechazo al nuevo decreto de Hacienda para los ayuntamientos. En un comunicado conjunto, los portavoces en la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), de PP, IU-Podemos-Comunes, Junts per Catalunya y Ciudadanos, calificaron de "completamente insuficiente" el documento tras la reunión de la junta de portavoces del órgano de poder local celebrada ayer.

Pero los socialistas tampoco se dan por satisfechos con la nueva propuesta de Hacienda. "La FEMP no renuncia a nada", manifestó ayer el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias y alcaldes de Vigo tras el encuentro de ayer en el que se acordó celebrar hoy una reunión de carácter técnico para avanzar en la propuesta económica, que será remitida directamente al departamento que dirige María Jesús Montero.

"Consideramos imprescindible que se apruebe todo aquello que está en el nuevo decreto anunciado por el Gobierno", advirtió el propio Caballero que, además, insistió en que "ha de aprobarse de forma inmediata".

El fracaso del primer decreto, que en el seno de la FEMP solo contó con el apoyo del PSOE y el voto de gracia de su presidente, llevó a Hacienda a mover ficha, aunque en un principio advertía de que no presentaría texto alternativo y dejó en manos de la oposición la elaboración de propuestas. No obstante, la reforma anunciada la semana pasada por Montero se limita a rescatar otros aspectos del decreto original, fundamentalmente la suspensión de la regla de gasto y el mantenimiento de las entregas a cuenta con cálculos previos al impacto de la crisis.

La propuesta económica planteada por los alcaldes a Hacienda pasa por recuperar el fondo de 5.000 millones de euros que planteó el Gobierno, otro destinado a cubrir la caída de ingresos de los transportes, y el uso de remanentes, unos 15.000 millones de euros ahorrados por 7.800 ayuntamientos que ahora mismo descansan en depósitos bancarios por los que las entidades vienen cobrando a los municipios.

En su comparecencia tras la reunión con los representantes de los demás partidos en la Junta de Portavoces de la FEMP, Caballero advirtió de que debe contemplarse como prioritario poder usar los remanentes de las entidades locales "de los que disponen 7.800 ayuntamientos". En el caso de los municipios gallegos, los ahorros que tienen bloqueados en los bancos y por los que tienen que pagar intereses rozan los 1.300 millones.

Según presidente de la FEMP, es "urgentísimo disponer del superávit" porque para, que esa disposición sea efectiva, es precisa una tramitación y apenas "quedan dos o tres semanas" Además, en el mismo plano de urgencia está, añadió, "el dejar sin efecto la regla de gasto y el resto de medidas contempladas en la última propuesta de Hacienda".

El también alcalde de Vigo calificó de "imprescindibles", además, los fondos de 5.000 millones y de transportes, que -recordó- estaban en el real decreto ley derogado en el Congreso y habilitar el uso de los remanentes acortando, si es posible, el tiempo para empezar a utilizarlos. "La FEMP no renuncia a nada", sentenció Caballero.

Por su parte, el portavoz del PP en el órgano de poder local y alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, celebró que finalmente "parece que algo se mueve en la FEMP".

El regidor zaragozano explicó que uno de los avances en el seno de la FEMP es que Unidas Podemos se opone a ese fondo de 3.000 millones y frente al cambio de la abstención por el voto a favor que emitió en la convalidación del primer real decreto en esta ocasión se opone. "Que no lo aprueben en el Consejo de Ministros porque podrían volver a sufrir una derrota democrática e histórica por segunda vez y queremos abrir un nuevo periodo de negociación para mejorar lo que ofrecía la ministra Montoro, que es insuficiente. Si se lograr mejorar en términos de justicia estoy convencido de que el acuerdo es absolutamente posible", advirtió Azcón.