Si en el escenario nacional PP y PSOE parecen enemigos irreconciliables, fuera de las trincheras las distancias políticas se acortan. Dos presidentes autonómicos del Partido Popular (Alberto Núñez Feijóo y Juan Manuel Moreno) y uno socialista (Emiliano García-Page) se sentaron ayer codo con codo para debatir sobre el modelo autonómico y la situación política de España y no hubo discusión: el mensaje fue prácticamente unánime.

Al debate tenía previsto incorporarse el presidente de Aragón, el también socialista, Javier Lambán, lo que equilibraría el balance de fuerzas entre PP y PSOE. Sin embargo, tuvo que ser ingresado por una prostatitis de origen infeccioso y no pudo acudir al Foro La Toja. En todo caso su ausencia no desestabilizó la batalla, puesto que más que una contienda en la que cada presidente defiende lo suyo se convirtió en una plataforma en la que todos unieron fuerzas para defender el Estado de las Autonomías y cargar contra los populismos.

El único punto de fricción fue por el reparto de tiempos para hablar. Juan Manuel Moreno pidió explayarse más en la segunda intervención, después de pecar de demasiado conciso en la primera ronda y ver como García-Page hablaba sin cortapisas. "Yo es que consumo también el tiempo de Lambán", dijo entre risas el manchego. Fue la única pulla de un debate en el que, salvo diferencias de matiz, los tres presidentes autonómicos evidenciaron que las diferencias entre PP y PSOE no son tantas, al menos en lo que se refiere al modelo de Estado. Ellos mismos ensalzaron la capacidad de las comunidades para ponerse de acuerdo frente a la inestabilidad política nacional.

No solo se citaron entre sí continuamente para darse la razón sino que utilizaron los mismos referentes en sus intervenciones. Tanto Juan Manuel Moreno, Feijóo como García-Page aludieron en algún momento de su discurso a los expresidentes Mariano Rajoy (PP) y Felipe González (PSOE), evidenciando que entre ellos tampoco hay diferencias en lo sustancial.

"Me identifico con políticos de altura como Rajoy o González", señaló el presidente andaluz. Feijóo repitió la definición que un día antes había dado en el Foro La Toja el expresidente socialista sobre los populismos y García-Page recordó que cuando Rajoy aplicó el artículo 155 a Cataluña, él lo apoyó.

Solo en su análisis respecto a la reforma del Senado hubo diferencias, aunque únicamente de matices. A la sintonía entre los tres presidentes contribuyó, en todo caso, que ni Feijóo ni Moreno lanzaron críticas directas al Gobierno de Pedro Sánchez y solo arremetieron de forma indirecta contra Unidas Podemos.